Reconozco que no soy un gran orador y que como mal español me gusta más oír a los demás que hablar. No tengo dentro ese tertuliano que, como el político español, es un ser del Renacimiento que sabe tanto de finanzas, como de empleo, como de previsiones micro o macroeconómicas y que vale tanto para gestionar y sentar cátedra, opinar de turismo, enseñanza, criptomonedas o la Eurocopa. 
Pero eso no quita que de vez en cuando a uno le guste despotricar sobre todos y sobre todo porque meterse con los demás, las cosas como son, relaja bastante.
El otro día nos dio por hablar de los jóvenes; quien más y quien menos fue joven en algún momento e incluso lo es ahora; aunque ser joven cada vez es más raro en España y le importa menos a la sociedad, a fin de cuentas, hoy hay más del doble de gente con cincuenta años que entre quince y veintinueve.
También es cierto que los españoles somos muy de alargar los tiempos y mientras la ONU te dice que eres joven hasta los veinticuatro, en España no sé muy bien porqué, o sí lo sé, estiramos el chicle hasta los veintinueve.
La cosa venía por lo de la emancipación y tener a las criaturas aún en casa cuando ocupan el doble de altura y espacio físico que tú. Los que somos padres desnaturalizados, firmes defensores de que nada como la distancia para querer más a la familia; y llevamos animando a los chavales a salir de casa (y a que no tengan prisa en volver) desde los cuatro años, reconocemos que la premiosidad y la demora en el abandono del hogar familiar se nos hace un pelín tortuosa.
Si a eso unimos que entre una cara de preocupación y una de pavor apenas media una buena estadística, no ayudó mucho que algún raja balones tirara de números, por más que yo trataba de animar transmitiendo mi sensación de que muchos jóvenes tienen las ideas y los valores más claros e incluso son más competitivos, lo cual no es necesariamente malo, que muchos de nosotros a su edad.
Según el Observatorio de Emancipación del Consejo de Juventud España sí es país para viejos, pero no es país, menos aún Castilla- La Mancha, país para jóvenes, ya que la media de emancipación en España está por encima de los 30 años, siendo Castilla- La Mancha la Comunidad Autónoma en la que más tarde se van de casa los jóvenes de toda España, con un 12,3 por ciento frente al 20,2 por ciento de Cataluña…
Así que, por favor, cuando este verano repartan el aguinaldo del Fondo de Compensación Interterritorial a ver si pillamos algo, aunque mal lo veo con eso de la "singularidad" de algunos, e invertimos en el tema porque si no veo que los chavales lo empezarán a tener todo calculado para emanciparnos a una residencia y desde allí prepararles tápers, mientras, si eso, ya la casa la cuidan ellos, sin pagar derramas lógicamente.