La Central Sindical Independiente y de Funcionarios CSIF denuncia la falta de personal que sufre la Residencia de Mayores Los Olmos de Guadalajara y que afecta principalmente a los colectivos de auxiliares de enfermería y personal de limpieza y servicios domésticos (PLSD), los cuales se han concentrado esta mañana a las puertas del centro para exigir una solución inmediata.
En cuanto a los auxiliares de enfermería, actualmente faltan 5 profesionales de los 44 puestos establecidos en la Relación de Puestos de Trabajo (RPT). Esta carencia está provocando una sobrecarga laboral que impacta directamente en la calidad de la atención que reciben los más de 80 residentes, todos ellos personas dependientes que requieren cuidados continuos y profesionalizados.
También, como consecuencia de esta falta de personal, los trabajadores tienen que acudir en sus días de libranza a trabajar, lo que afecta a la conciliación de la vida familiar y laboral y además genera 'incidencias' que también repercuten económicamente en las arcas de la Administración.
Además, también faltan 7 trabajadores de limpieza y servicios domésticos, lo que repercute en las condiciones de higiene y salubridad del centro, aumentando el riesgo de problemas sanitarios.
Los trabajadores, apoyados por CSIF, han desplegado pancartas en la concentración realizada hoy a las puertas de la residencia para hacer visible la urgente necesidad de cubrir las plazas vacantes y garantizar un entorno laboral adecuado, tanto para el personal como para los residentes.
CSIF denuncia que mientras no se cubren vacantes como las de la Residencia de Los Olmos y en otros centros dependientes de las Consejería de Bienestar Social y de Sanidad, como por ejemplo la Unidad Residencial y Rehabilitadora Alcohete de Yebes, el Gobierno regional aumenta su estructura mediante la creación de plazas de libre designación y personal de confianza. De hecho, el pasado viernes en la Mesa de Personal Funcionario de la Junta de Comunidades se abordó la creación de siete nuevos puestos con un coste cercano a los 400.000 euros.
CSIF denuncia que la sobrecarga de trabajo está llevando al límite a los empleados, afectando tanto su salud laboral como la seguridad y bienestar de los usuarios de la residencia. El sindicato exige a las autoridades competentes una respuesta urgente para solucionar la situación y garantizar que el centro cuente con el personal necesario para ofrecer una atención digna y adecuada a cada uno de los usuarios del centro.