La Orden de Calatrava fue muy importante para nuestra provincia. Hace tan solo unos años su legado siguió extendiéndose con la Ruta Jacobea de los Calatravos, gracias a la promesa que hicieron Victoriano Arias y su sobrino a causa de la enfermedad de la mujer de Victoriano.

«Es un Camino de Santiago lleno de contrastes", esgrime Victoriano. "Al hacerlo por la Cañadas de la trashumancia hay etapas que te trasladan a la Edad Media, ya que no ha cambiado nada desde entonces. Cruzando pueblos cargados de historia, con vestigios de la presencia de tiempos de las Órdenes Militares de Calatrava, Santiago y  San Juan de Jerusalen disfrutando de entornos únicos con atractivos culturales y gastronómicos inmensos.», apunta. 

Esta Ruta de los Calatravos entra en la provincia por Mondejar, para pasar por Pastrana, Fuentelaencina y Budia, llegando  a Solanillos del Extremo, Las Inviernas, Torremocha del Campo, para abandonar la provincia por Sigüenza de camino a tierras sorianas. 

Cruz que indica el camino en la localidad de Mondéjar. - Foto: Ruta Jacobea de los Calatravos

Victoriano y su sobrino decidieron trazar esta nueva Ruta de manera que no pasase por ninguna carretera y para ello se basaron en los planos del Instituto Geográfico Catastral y en la cañada real oriental o soriana. Sin embargo durante el recorrido encontraron algunas diferencias con el trazado original que aparecía en los mapas, por lo que tuvieron que hacer ajustes durante la señalización de la ruta, que transcurre por Castilla la Mancha, parte de Madrid, Castilla y León y la Rioja hasta Santo Domingo de la Calzada, donde empalma con el camino Francés hasta Santiago de Compostela.

«La ruta está ya a nivel internacional. En Italia ha tenido mucha captación, al igual que en peregrinos del resto de España», señala Victoriano, quien añade que «el peregrino que quiera hacer la ruta puede hacerlo vía satélite y no se pierde». Además, recuerda que «la ruta está ya señalizada y cada vez tiene más peregrinos, la cosa está en que sea aceptada por las comunidades e instituciones».

Y es que en Santiago comunicó al director general de Caminos que quería crear una nueva ruta. Éste le dio unos consejos para hacerlo y muchos ánimos, aunque fue sincero y le comentó que no era cosa fácil, que existían diferentes problemas, como pudo comprobar Victoriano en estos años. Pese a ello, el camino va se va consolidando como ruta jacobea alternativa a las habituales.

La ruta

La ruta se identifica durante todo el trayecto por un logotipo compuesto por la cruz de los monjes de Calatrava (cruz con una flor de lys en las puntas), una vieira amarilla sobre un fondo azul y la cruz de Santiago. Para ello se elaboraron tablillas que desde los tres puntos de inicio están presentes por toda la ruta hasta San Millán de la Cogolla.

«Me he encargado de todo», reaclaca Victoriano. «Del Instituto Geográfico y Catastral cogí los mapas y aproveché la Cañada Real Soriana, la mayor de España, para trazar la ruta», explica.

Fue Victoriano el encargado de ir señalizando toda la ruta, así como de instalar varias cruces de la Orden de Calatrava en algunos de los pueblos por donde pasa la ruta, una de ellas está en Mondéjar.  

El camino está compuesto por veintidós etapas. Las dos primeras son de treinta kilómetros y las siguientes son de veinticinco y de quince kilómetros. No presenta gran dificultad, pero hay tramos como el que va desde Sigüenza hasta Rello, que los peregrinos se ven forzados a realizar completamente, ya que no se encuentran alojamientos entre pueblos al ser una zona especialmente despoblada.

La Ruta Jacobea de los Calatravos es un camino largo, de más de 1.200 kilómetros. Cruza con otras muchas rutas de peregrinación como el camino de la Lana, el camino del Sureste, el Castellano-aragonés, que debió de ser muy importante en la Edad Media, y el camino de Uclés, así como con itinerarios culturales como el camino del Cid y la Ruta del Quijote.