La demografía provincial continúa en notable ascenso

Inmaculada López Martínez
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El número de habitantes de la provincia de Guadalajara creció un 1,92% a fecha 1 de enero de 2024 motivado, una vez más, por el fuerte empuje del Corredor del Henares

Vista de la calle Mayor de Guadalajara, el municipio de la provincia que sumó un mayor número de habitantes a su padrón a fecha 1 de enero de 2024. - Foto: Javier Pozo / Archivo

La población de la provincia de Guadalajara creció en 5.262 personas a 1 de enero de 2024 con respecto a la misma fecha del año anterior, tal y como muestran las cifras oficiales de revisión del padrón municipal publicadas en el Boletín Oficial del Estado (BOE) del pasado 12 de diciembre y recogidas por el Instituto Nacional de Estadística (INE). En concreto, la provincia alcarreña pasó de tener 274.598 habitantes en 2023 a contabilizar 279.860 en 2024, lo que supone un ascenso del 1,92 por ciento y la octava subida demográfica consecutiva de los últimos años. 

De nuevo, la pujanza económica y laboral que experimenta el Corredor del Henares tiene su reflejo en la llegada de nuevos moradores a las localidades de esta zona de expansión. Así, la capital registró el mayor incremento de padrón en términos absolutos, con 1.899 nuevos vecinos, alcanzando de esta manera un total de 90.909. Se trata de un repunte del 2,13 por ciento, uno de los más importantes registrados en la ciudad en la última década. A continuación, se sitúa Azuqueca de Henares, que ganó 396 vecinos a lo largo de 2023 (+1,12%) para situarse en los 35.894, consolidándose como el segundo municipio más poblado de toda la provincia. El Casar ocupa la tercera posición del pódium de ascensos demográficos gracias a sus 301 nuevos empadronados (+2,26%), por lo que se mantiene como el tercer municipio con más habitantes a nivel provincial, un total de 13.628.

El siguiente en el ránking de incrementos demográficos es Cabanillas del Campo, que recibió 295 nuevos pobladores (+2,67%) hasta situarse en los 11.329. Seguidamente, aparece Marchamalo, localidad que sumó 224 residentes más (+2,71%) a su padrón para llegar a los 8.497. Yebes es el siguiente municipio guadalajareño que más habitantes recibió, 201 (+3,85%), y se establece en 5.541 gracias, una vez más, al crecimiento poblacional que continúa aconteciendo en Valdeluz. En Alovera, el cuarto municipio más poblado de la provincia, también siguieron llegando nuevos vecinos, 178 (+1,33%) y alcanza ya los 13.585. 

Sin estar propiamente ubicados en la franja del Corredor del Henares, los siguientes municipios que experimentaron mayores subidas demográficas a 1 de enero de 2024 comparten cercanía y buenas comunicaciones con la vecina Comunidad de Madrid o con el área de influencia de la capital alcarreña. Se trata de Uceda, que suma 160 nuevos vecinos (3.303 en total); Horche, con 156 habitantes más (2.934 en total) y Yunquera de Henares, que añade 137 nuevos moradores (4.566 en total). Otras localidades de esta zona geográfica que que vieron crecer su padrón de manera considerable fueron Torrejón del Rey (+114 y 6.324 habitantes), Loranca de Tajuña (+99 y 1.608 habitantes), Villanueva de la Torre (+93 y 6.696 habitantes), Chiloeches (+90 y 4.067 habitantes), Valdeaveruelo (+84 y 1,290 habitantes), Galápagos (+75 y 2.748 habitantes), El Pozo de Guadalajara (+73 y 1.699 habitantes), Pioz (+73 y 5.204 habitantes),Trijueque (+66 y 1.626 habitanes), Humanes (+60 y 1.784 habitantes) y Torija (+39 y 1.764 habitantes).

Cabeceras Comarcales

No obstante, la mejor noticia que deja la última estadística del INE es la consolidación de una tendencia demográfica creciente en la mayoría de las cabeceras de comarca que están más alejadas de la capital, es decir, en las áreas rurales. En este contexto, por segundo año consecutivo, destaca Sigüenza, que suma otros 122 nuevos vecinos a su término (+2,59%) , llegando así a los 4.830. También llama la atención el caso de Brihuega, que sigue recibiendo habitantes (+82) y contabiliza un total de los 2.816. Mondéjar es otra de las localidades de referencia que se mantiene al alza y alcanza ya los 2.900 habitantes (+61). En la Alcarria, también hay que mencionar el incremento de residentes que experimentan Sacedón (+29 y 1.595 habitantes) y  Cifuentes (+19, y 1.701 habitantes)así como otros pueblos de menor tamaño como son Albares (+85, 608 habitantes), Illana (+41, 919 habitantes), Lupiana (+32, 325 habitantes), Tendilla (+23, 335 habitantes) y Almonacid de Zorita (+21, 659 habitantes), entre otros.

En la comarca serrana, también es remarcalbe Jadraque, que con 41 nuevos vecinos llega a los 1.458. Espinosa de Henares, Torre del Burgo, Torre del Burgo, Irueste, Alustante, Malaguilla, Quer, Albalate de Zorita, Auñón, Pareja, Almadrones, Hita, Casas de Uceda, Matillas, Millana y Heras de Ayuso son el resto de localidades de la provincia que crecieron en más de una decena de habitantes.

A nivel porcentual, los repuntes de población más altos tuvieron lugar en pequeños pueblos:Torremochuela (pasa de seis a ocho habitantes, +33,33%), Congostrina (de 13 a 17, +30,77%), Fuembellida (de 11 a 14,+27,27%), Irueste (de 68 a 86, +21,82%), Almadrones (de 55 a 67, +36,59%), Copernal (de 38 a 46, +21,05%), Villaseca de Henares (de 24 a 29, +20,83%) y Barriopedro (de 20 a 24, +20%).

Tal y como refleja la estadística del INE, afortunadamente, no se han producido descensos demográficos de gran consideración en los municipios de la geografía provincial. En niveles absoluto, la bajada más fuerte es la de Almoguera, que pierde 42 habitantes (-2,97%) y se sitúa en los 1.373 seguida de Mazuecos (-30 y 282 habitantes), Alcocer (-21 y 315 habitantes), Corduente (-20 y 290 habitantes) y Checa (-14 y 271 habitantes). En todo caso, la localidad más relevante de la provincia afectada por esta situación es Molina de Aragón que, tras conseguir ganar 54 habitantes a fecha 1 de enero de 2023, pierde ocho un año después para quedarse en los 3.280. Un caso similar es el de Atienza que, tras haber sumado 36 nuevos residente, la última revisión del padrón le resta 12 y se sitúa en 422. Lo mismo ocurre con Pastrana, que había crecido en 51 habitantes, pero ahora pierde 10 y contabiliza 891. Por porcentajes, todas las bajadas más significativas se localizan en pueblos de escasamente poblados y mayormente ubicados en las comarcas de la Sierra Norte y el Señorío molinés, las más afectadas por el fenómeno de la despoblación. Es el caso de  Tordelrábano (-31,25%, pasa de 16 a 11 empadronados), Gascueña de Bornova (-19,35%, de 31 a 25), Castelar de Muela (-17,39%, de 23 a 19), Cincovillas (-17,39%, de 23 a 19), Arbetea (d-15,79%, de 19 a 16) y Hombrados (-15,69%, de 51 a 43), entre otros. 

Por otro lado, cabe destacar que Guadalajara es la provincia de Castilla-La Mancha que, a nivel porcentual, experimentó un aumento de población más importante. En términos absolutos fue Toledo (+11.652), que continúa siendo la provincia más poblada (740.148 habitantes). En lo que respecta a las capitales de provincia, Guadalajara también fue la que más creció tanto en términos absolutos como en porcentaje, manteniéndose como la segunda con mayor número de empadronados de la comunidad autónoma, sólo por detrás de Albacete (173.206).