La candidata del PP al Ayuntamiento de Guadalajara, Ana Guarinos, compareció este viernes, junto al portavoz de la formación en el Consistorio, Jaime Carnicero, y acompañados de algunos de los concejales populares, para hacer balance sobre los cuatro años de legislatura del Gobierno de coalición PSOE-CS, otorgando un suspenso claro a la gestión del socialista Alberto Rojo.
Para Guarinos, es evidente que a Alberto Rojo "le ha venido muy grande" el cargo y cree que "pasará a la historia" de la ciudad como "un mal gestor, un mal administrador y una persona que no es de fiar". Así de clara se pronunció la candidata popular.
"Va a dejar el Ayuntamiento, haciendo honor a su apellido, en números rojos, arruinado y empantanado, por no saber gestionar". "Lo ha tenido todo y no ha hecho nada o casi nada", abundaba.
Y es que, para Guarinos, "han sobrado anuncios y faltado soluciones", y ahora Rojo está pidiendo una segunda oportunidad cuando "las segundas oportunidades son para los malos estudiantes", señalaba la candidata, para quien su contrincante "no ha estado a la altura" de lo que necesitaba la ciudad, ni ha sido capaz de sacar adelante ninguno de los grandes proyectos con los que se presentó a la Alcaldía la pasada legislatura.
"Su aportación más llamativa fue la contratación de una discomóvil durante la pandemia; concursos desiertos, y un Mercado de Abastos que no ha sido capaz de dinamizar", abundaba. Un encuentro informativo en el que la candidata popular también se mostró crítica con la inacción del Gobierno de Rojo en materia deportiva "por una cuestión meramente ideológica"; cree que la ciudad está "más sucia y descuidada que nunca", y lamenta que "por dejadez" se haya perdido el sello de Ciudad Amiga de la Infancia, asegurando también que acabará el mandando debiendo más de cuatro millones de euros a las empresas concesionarias.
No quiso dejar pasar por alto que desde que está de alcalde la ciudad tiene un mayor índice de criminalidad, ni tampoco su "silencio" mientras se suspenden cuatro de las cinco paradas del AVE en la estación Guadalajara-Yebes o con los problemas que hubo en la línea de Cercanías.
En opinión de Guarinos, Rojo "no tiene palabra y no ha cumplido ninguno compromisos con los que se presentó", con referencia específica al Plan de Casco Histórico, de que solo hay un anuncio de marca y una oficina, y si bien presume de crear suelo industrial, "se irá de la Alcaldía sin haber aportado un metro cuadrado más de los que se encontró al llegar".
Para la candidata del PP, Rojo está instalado en el metaverso y pasará a la historia como el delegado de García Pague y la guardia pretoriana de Pedro Sánchez".
Y frente a ello, Guarinos afirma que ella está preparada para gobernar y para esta a la altura, aunque por el momento sigue manteniendo silencio sobre su lista electoral y sobre cuándo se dará a conocer. "Se conocerá en unos días", apuntó, y sobre su programa electoral dijo que ya está "perfilado" y que se presentará antes de finales de abril.
Preguntada sobre futuros pactos, afirmó que la intención del PP pasa por gobernar en solitario con mayoría suficiente, aunque admitió que será a partir del día 28 de mayo cuando toque hablar de ello porque lo contrario supondría renunciar a gobernar.
En su intervención, Jaime Carnicero, reconoció que si bien Rojo tenía el listón muy alto tras el Gobierno de Antonio Román, después de estos cuatros años de gobierno PSOE-CS los ciudadanos pagan más impuestos en Guadalajara, hay asfixia económica, la calidad de los servicios bajó de manera notable, las calles "están de vergüenza" y las únicas inversiones que ha hecho son "maquetas, maquetitas, planos y planillos quedándose exclusivamente en el titular".
"El experimento PSOE-CS ha sido nocivo para Guadalajara y Rojo se irá de la Alcaldía dejando el Ayuntamiento arruinado", subrayó.