Año y medio después de que el Ayuntamiento de Cabanillas del Campo aprobara una suspensión de licencias para la instalación en la localidad de "macroparques" de energía solar (medida que se tomó en el contexto de la aparición de varios proyectos que amenazaban, por su cercanía, zonas residenciales y parajes naturales de la localidad) el Consistorio cabanillero ha sacado adelante la modificación parcial de su Plan de Ordenación Municipal que se decidió acometer mientras estas licencias estaban suspendidas, de cara a ordenar el territorio, y establecer con claridad dónde sí y dónde no pueden ubicarse este tipo de instalaciones.
Esta modificación del POM (la décima que se implementa desde que se aprobó el vigente Plan de Ordenación) ha salido adelante en una sesión de Pleno Ordinario, y lo ha hecho sin votos en contra: apoyo de 13 concejales (los del Equipo de Gobierno del PSOE y los grupos políticos de Vox y Unidas Podemos) y la abstención de los cuatro ediles del Grupo Popular.
Según explicó el alcalde, José García Salinas, en la exposición del punto, la modificación del POM viene a "ordenar el territorio del término municipal", estableciendo que sí se permiten las instalaciones de autoconsumo en cualquier contexto (residencial o industrial), pero se limita la instalación de grandes plantas de generación, básicamente, a su ubicación en zonas de suelo industrial. La modificación, ha dicho Salinas, ha sido fruto de un concienzudo trabajo del departamento técnico de Urbanismo del consistorio, y cuenta con todos los informes favorables, por lo que una vez producida esta aprobación inicial, se remitirá a la Consejería de Fomento, organismo competente para dar su visto bueno.
Este asunto de la modificación del POM es el más trascendente en un Pleno en el que el Ayuntamiento también ha aprobado un reconocimiento extrajudicial de créditos para el abono de tres facturas pendientes de pago por servicios prestados en ejercicios anteriores (y que ha salido adelante con el voto del PSOE y Unidas Podemos, y la abstención de PP y Vox), pero en el que el grueso del tiempo y las discrepancias mayores se lo ha llevado el debate de tres mociones de carácter político que se han tratado a continuación: una presentada por el Grupo Socialista, otra conjunta de PP y Vox, y una más de Unidas Podemos.
Así, se ha aprobado una moción del PSOE en contra del veto que el Senado, con la mayoría del Partido Popular, pretende imponer a la senda de estabilidad planteada por el Gobierno, una decisión que puede suponer que de nuevo regresen las restricciones de gasto que se establecían a comunidades autónomas y ayuntamientos, y que perjudica de manera clara a consistorios como el de Cabanillas, completamente saneado, con deuda cero, al restringir la capacidad de gasto e inversión del consistorio, a pesar de contar con remanentes de tesorería para poder utilizarlos en actuaciones necesarias. Esta moción se aprobó con el voto del PSOE, la abstención de Unidas Podemos, y la oposición de PP y Vox.
También se ha aprobado la moción presentada por PP y Vox de modo conjunto, que protestaba contra el establecimiento del nuevo impuesto del "canon del agua" que va a sacar adelante la administración autonómica, adaptando una directiva europea de obligado cumplimiento. PSOE y Podemos se abstuvieron, así que la propuesta salió adelante con 7 votos a favor (PP-Vox), diez abstenciones y sin votos en contra.
Fue rechazada finalmente una moción de Unidas Podemos que pretendía instar a la Junta de Comunidades a declarar a Cabanillas del Campo como "zona residencial tensionada" en materia de vivienda. Esta propuesta sólo contó con el voto favorable de la edil de Unidas Podemos, el voto en contra de PP y PSOE, y la abstención de los concejales de Vox.