Ponen a la venta el Monasterio de Sopetrán por 7.900.000 euros

David López
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Un terreno de 165.000 metros cuadrados que dispone de los permisos oficiales aprobados y vigentes para desarrollar tres proyectos básicos, así como de la licencia para la primera fase.

Imagen de lo que sería el Monasterio rehabilitado según el proyecto. - Foto: La Tribuna

El Monasterio de Sopetrán de Hita vuelve a ser noticia, ya que desde hace unos meses volvió a ponerse a la venta. Así, en un portal inmobiliario aparece un anunció en el que se vende el solar con el Monsasterio por 7.900.000 euros.

Un terreno de 165.000 metros cuadrados, -con 47.169 metros cuadrados de uso residencial-, que dispone de los permisos oficiales necesarios aprobados y vigentes para el desarrollo de tres proyectos básicos y otros menores, así como de la licencia para la primera fase.

El primer proyecto consiste en la rehabilitación del Monasterio de Sopetrán para su explotación posterior como Centro Internacional de Formación y lugar de eventos empresariales y lúdicos.

El segundo proyecto contempla la construcción en su entorno, de un pueblo medieval, rigurosamente peatonal con todas las viviendas diferentes entre sí. Un total de 327 viviendas u más de 41 locales comerciales para su comercialización y su venta.

El tercer proyeto es la explotación de los recursos del Monasterio, y del pueblo (concepto Resort), y a otros negocios complementarios, tales como la explotación manantiales propios de agua potable, bodegas, actividades lúdicas y turísticas, eventos…..

«Se trata de un proyecto singular y de alta rentabilidad, contrastada con estudios sólidos elaborados por Consultoras de primera línea internacional. Disponemos de los planes de negocio y toda la documentación al día», apuntan desde la inmobiliaria encargada de la venta del terreno.

El origen de este Monasterio, situado en la vega del río Badiel, se pierde en la alta Edad Media Visigoda. Se conservan parte de los muros exteriores. En el extremo Norte estuvo la Iglesia de la que solo quedan cuatro enormes basas del crucero, y algunos restos de las claves y nervios de las bóvedas caídos por el suelo.