Los inmigrantes se encuentran entre los colectivos que hoy por hoy tienen más problemas para acceder a una vivienda. Los precios son abusivos en algunos casos y las fianzas también. Aunque no hay que echarle toda la culpa a los propietarios ya que también hay personas que no pagan o que dejan el piso destrozado cuando se marchan.
En todo caso, las dificultades para el acceso a la vivienda son hoy en día el problema fundamental que sufren los colectivos más vulnerables, especialmente los inmigrantes, tanto en Castilla-La Mancha como en el caso concreto de Guadalajara, de ahí que el responsable de Accem en la región, Braulio Carlés, haya pedido que se elaboren "con urgencia" leyes que impidan "abusos en ambas direcciones", tanto por parte de los propietarios como de los inquilinos.
"El tema de la vivienda sigue siendo un problema que afecta más a las partes más débiles como es la migración", ha señalado Carlés, reclamando que se tomen medidas para gestionar que los precios sean acordes a la calidad del piso y que no pueda haber "abusos" ni por parte del propietario ni por parte de la persona que alquila.
Desde Accem se están encontrando situaciones de propietarios de pisos que piden "cuantías desproporcionadas" para una vivienda sin ascensor y pequeña, cantidades que pueden llegar hasta los 700 euros y con fianzas de hasta dos meses, sin negar tampoco que no se puede consentir que haya inquilinos que dejan el piso en "malas condiciones o que no paguen".
"No puede ser que se pida por un piso sin ascensor 700 euros y dos meses de fianza. Esto no puede ser, como tampoco que el inquilino no pague y deje el piso destrozado", ha subrayado, situaciones que desde Accem conocen bien porque ayudan a colectivos vulnerables a la búsqueda de vivienda.
De hecho, esta asociación cuenta con programas de viviendas concedidos por el Gobierno de Castilla-La Mancha de los que realizan un seguimiento para asegurarse de que todo marcha bien.
Para este responsable es fundamental que exista un trabajo de coordinación conjunta entre las entidades sociales y las administraciones, entendiendo que en la actualidad el acceso a la vivienda "es la mayor dificultad que hay para la inserción ya que trabajo hay más", ha apuntado. "No se pueden permitir actitudes ni mafiosas ni abusivas solo porque haya mucha demanda", ha remarcado.
En referencia concreta a los programas de acogida a inmigrantes, Carlés ha señalado que tienen prácticamente cubiertas el millar de plazas con las que cuenta la asociación en la región, más de la mitad en Guadalajara. Sin embargo, ha apuntado que si hiciera falta incrementar los dispositivos por necesidad, podrían dar respuesta. "Ojalá llegue el momento en el que no haya que celebrar el Día del Inmigrante", ha declarado.