Las regiones europeas del vino piden protección frente a la guerra comercial iniciada por Trump con sus aranceles. Castilla-La Mancha ha ratificado la declaración conjunta del intergrupo del vino en el Comité Europeo de las Regiones para la «protección de las regiones y del sector vitivinícola europeo frente a conflictos comerciales injustificados». Lo remarcó el vicepresidente segundo, José Manuel Caballero, que defendió desde Bruselas los intereses del sector vinícola castellanomanchego en la constitución de este intergrupo de trabajo. Castilla-La Mancha ha sido precisamente una de las comunidades autónomas impulsoras.
En esta declaración, motivada por el conflicto comercial entre los EEUU y la UE, se reconoce el perjuicio para la industria vitivinícola, al tiempo que desde el Comité Europeo de las Regiones se pone en valor la importancia de estos productos para la identidad regional y cultural, la economía y las estructuras sociales de Europa. Por eso piden a la Comisión Europea y al Parlamento Europeo «que excluyan el vino y el vino espumoso del conflicto comercial entre la UE los Estados Unidos».
«Esperamos que la Comisión Europea, en nombre de todos los estados miembros europeos, entable negociaciones con los Estados Unidos para resolver estas disputas comerciales y garantizar que el sector vitivinícola se mantenga al margen de ellas», expone.
Con esta declaración exigen elaborar un informe a escala de la Unión Europea sobre el impacto económico de estos aranceles, con el fin de desarrollar estrategias adecuadas, garantizar la competitividad a largo plazo del sector, así como reconocer que el vino como un bien cultural.