El Pleno del Ayuntamiento de Cabanillas del Campo ha aprobado este martes una modificación de la Ordenanza Fiscal Municipal que regula la tasa de la recogida domiciliaria de basuras en la localidad, adaptando la norma propia a las nuevas exigencias que establece la legislación nacional; una ley que, a su vez, responde a la directiva europea que hay establecida en esta materia.
Cabe explicar que, básicamente el sentido de la modificación a la que se obliga a los ayuntamientos es que, a partir de 2025, todos los consistorios deberán establecer una tasa de basuras que cubra realmente el coste del servicio, de manera íntegra, impidiéndose, como ocurría hasta ahora, que los municipios tengan "tasas deficitarias", y que el coste del servicio se pueda compensar a través de la utilización del Presupuesto general.
La medida se ha debatido en una sesión de carácter extraordinaria y urgente, ya que los plazos dados por el Gobierno central han sido muy ajustados, y era preciso sacar la modificación para que pueda entrar en vigor el 1 de enero, tras pasar todos los trámites de exposición pública. La nueva normativa ha salido adelante con los votos favorables del Equipo de Gobierno del PSOE y de la concejala de Unidas Podemos, la abstención del Grupo Popular, y el único voto en contra de los ediles de Vox.
En lo que respecta a los efectos de la nueva tasa, el alcalde, José García Salinas, ha explicado que se ha tratado de hacer un reparto justo y equitativo de la subida que se obliga a hacer al Ayuntamiento. "A nadie nos gusta tener que subir una tasa o un impuesto, pero las leyes están para cumplirlas, y todos tenemos que hacerlo. En este sentido, creo que la propuesta que hemos realizado, en base al estudio de costos realizado por los técnicos municipales, es justa y equilibrada", defendía el primer edil.
Así, en el caso de Cabanillas del Campo, el costo del servicio de basuras no se verá incrementado para los hogares, de modo que la subida no repercutirá en las familias, sino que será asumido principalmente por las empresas, y además de un modo proporcional, dado que se han establecido nuevos tramos, antes inexistentes, en función del tamaño de las mercantiles, buscando un reparto equitativo, y siguiendo siempre la máxima de que pague más quien más residuos genere. Así, de manera general, los pequeños negocios y comercios tendrán subidas que en ningún caso superarán los 30 euros anuales, mientras que serán las grandes multinacionales, empresas y logísticas, las que generan más residuos, quienes asuman la mayor parte del incremento.
En el debate del punto, la concejala de Unidas Podemos ha mostrado su acuerdo, tanto con la Ordenanza aprobada, como con el sentido de las nuevas normas nacionales que la impulsan. El portavoz del PP ha valorado positivamente el modo en el que el Ayuntamiento ha adaptado la norma nacional, aunque ha justificado su abstención en su desacuerdo con esta legislación superior. Y Vox ha justificado su voto contrario tanto en su oposición, tanto a la legislación nacional, como a la directiva europea que ha establecido estos nuevos criterios.
Finalmente, cabe reseñar que, al finalizar la sesión plenaria, la corporación ha guardado un minuto de silencio en memoria de las víctimas de las riadas padecidas en el este del país en la última semana.