En Castilla-La Mancha la brecha salarial media entre hombres y mujeres es del 15%, un punto menos que el año anterior y tres puntos menos que a nivel estatal, que se sitúa en el 18,6%. Aún así, las mujeres castellanomanchegas tendrían que ganar 3.742 euros más al año para igualar su salario anual al de los hombres.
Este es el principal dato que se extrae del VII Informe sobre la brecha salarial en Castilla-La Mancha, elaborado por Comisiones Obreras (CCOO).
La brecha salarial de género se explica, argumentó la secretaria de Mujeres y Políticas LGTBI del sindicato, Rosario Martínez, por tres componentes: la desigualdad a priori, ya que las mujeres parten de una peor situación a la hora de afrontar su vida laboral; la desigualdad durante, es decir, la que soportan las mujeres a lo largo de su trayectoria profesional; y la desigualdad a posteriori, esto es, la brecha en las pensiones.
Actualmente, añadió la técnico en Igualdad de CCOO, Castilla-La Mancha tiene la brecha salarial más baja de los últimos años, aunque continúa siendo «injusta y discriminatoria». En una década se ha pasado de una brecha del 21% al 15% y esto se debe, entre otros factores, a la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), a la reforma laboral y al Acuerdo por el Empleo y la Negociación Colectiva.
Cervantes lamentó que la parcialidad en el empleo sigue castigando especialmente a las trabajadoras. De las 368.000 mujeres ocupadas, el 25,1% tiene un contrato a tiempo parcial. Entre los hombres, el porcentaje de jornadas parciales baja hasta el 5,7%.
Del mismo modo, subrayó que el 88,7% de las excedencias por cuidado de hijos el año pasado fueron cogidas por mujeres. En total reclamaron este derecho 3.145 trabajadoras frente a 86 hombres. En el caso de las excedencias por cuidado de familiares, el 75,29% son de mujeres.
Otro de los datos de este informe y que explican la brecha salarial es que el 38% de las mujeres en situación de inactividad lo están por dedicarse a tareas del hogar, frente a menos del 6% entre los hombres.
La base de cotización media de las trabajadoras en la región es de 1.747 euros, un 14,2% menos que los hombres (2.035 euros).
Complementos masculinizados. Otra de las causas de esta brecha son los componentes salariales, que están «masculinizados», explicó Martínez, y que suponen en torno a un 30% del salario de los hombres.
Respecto a la tasa de empleo, la de las mujeres se sitúa 15 puntos por debajo de la de los hombres (43,7% frente al 58,53%). En el caso de tener hijos esta diferencia aumenta, siendo la de los hombres del 90% y la de las mujeres del 70%.
El informe incluye además una serie de propuestas, en concreto 45 medidas a adoptar desde diferentes ámbitos que «posibilitarían esa reducción necesaria y deseada para la consecución de una sociedad justa y democrática», señaló la secretaria de Mujeres y Políticas LGTBI.
Así, el sindicato plantea acciones desde la educación que «es uno de los instrumentos más importantes para lograr la igualdad», subrayó Martínez, la corresponsabilidad, apostar por un fortalecimiento de los servicios públicos que posibiliten el acceso de las mujeres al empleo en igualdad de oportunidades, la aprobación de una Ley autonómica de igualdad retributiva y contra la brecha salarial o la obligatoriedad de que las empresas de más de 50 trabajadores negocien un plan de igualdad. De hecho de las 608 empresas obligadas a contar con ellos, tan solo lo tienen registrado 367.