El concepto de ecoturismo, aparte de integrar los valores de sostenibilidad, respecto y conservación de la naturaleza, gira alrededor de la motivación que tienen los turistas por la observación y el conocimiento del medio ambiente así como de las culturas tradicionales prevalecientes en las zonas rurales. Del mismo modo, hace especial hincapié en aspectos pedagógicos y de interpretación de la naturaleza.
Por todo ello, los tres principales espacios naturales que atesora la provincia de Guadalajara –los parques naturales de la Sierra Norte, el Barranco del Río Dulce y Molina-Alto Tajo– se convierten en destinos perfectos para los amantes de este turismo que permite el descubrimiento y el contacto directo con la naturaleza. Además, el gusto creciente entre la ciudadanía por este tipo de viajes de recreo ha hecho que también se amplíe la oferta tanto de casas rurales y alojamientos como de actividades de ocio y deporte complementarias.
Silvia Hinojosa es gerente de Tubkala, una de las empresas comprometidas con el medio ambiente que opera en la Sierra Norte de Guadalajara desde 2019 ofreciendo rutas interpretadas por la comarca, sobre todo, por el Hayedo de Tejera Negra que es el espacio más solicitado por sus clientes. Además, organizan veladas astronómicas, una propuesta cada vez más demandada por las personas que visitan este destino natural certificado como reserva Starlight 'Cielos de Guadalajara' junto con una parte de Molina-Alto Tajo. «La calidad de cielo es muy buenas, las estrellas se ven aquí como en pocos sitios y es una de las actividades que más tirón está teniendo», confirma esta educadora ambiental. «Percibo que hay más interés por el medio natural, que la gente encuentra más oportunidades y experiencias para disfrutarlo y con una mayor consciencia de que es necesario cuidarlo», afirma Silvia Hinojosa desde su experiencia profesional.
Las veladas astronómicas y el senderismo son dos actividades ligadas al ecoturismo que ganan adeptos. - Foto: L.T.Próximo proyecto
Una opinión parecida es la que manifiesta la presidenta de la Asociación de Turismo Sierra Norte, Isabelle Bancheraud, quien avanza que una de las iniciativas en las que va empezar a trabajar el colectivo que representa es en la creación de paquetes de fin de semana que aúnen alojamiento y experiencias (observaciones, rutas guiadas, visitas a talleres y productores locales, etc.)de las empresas asociadas que cuentan con certificación ecoturística. «Queremos ahondar en la filosofía de hacer una red entre todos y defender la sostenibilidad del territorio en el que estamos, trasladando esta conciencia a los clientes ya que muchos todavía carecen de esa sensibilidad medioambiental que ya sí aprecia en los profesionales», indica esta empresaria hostelera.
Por su parte, el delegado provincial de la Junta de Comunidades, José Luis Escudero, hace referencia a ese «nicho potencial de visitantes que escogen cada vez más un destino de interior frente a otros destinos como el de costa» y que, además, «ya no vienen solamente un día o están de paso sino que eligen pernoctar y quedarse durante tres o cuatro días». En este sentido, Escudero recuerda que «tenemos el privilegio de contar con una provincia que es un tesoro natural, con nada más y nada menos que tres parques naturales en nuestro interior, la que más de toda Castilla-La Mancha, y en una ubicación estratégica». Por tanto, a juicio del delegado, «tenemos una oportunidad que no debemos desaprovechar, pero siempre armonizando la llegada de visitantes con la capacidad que tiene el territorio para poder absorberlos sin que haya un efecto negativo en el entorno natural».
En todo caso, José Luis Escudero alude al «compromiso» que el Gobierno regional tiene con la promoción del turismo sostenible y la gestión de las áreas protegidas. Así, aparte de la mejora de diferentes infraestructuras públicas, el responsable de la Junta también hace mención a la progresiva ampliación de la red de miradores Starlight o a la edición de nuevas guías de todos los parques naturales de la región, disponibles tanto en formato papel como en digital (https://areasprotegidas.castillalamancha.es/). «Ahora mismo estamos inmersos en la promoción de una APP de senderos en los espacios naturales y también en su incorporación en la plataforma de wikiloc», avanza. «Son distintas medidas como ves y todas en la misma dirección», sostiene Escudero, al tiempo que manifiesta su «satisfacción» con el trabajo que están realizando en esta línea los empresarios del sector. «Que cada vez haya más alojamientos y empresas adheridos al sistema de reconocimiento de la sostenibilidad del turismo de naturaleza es un marchamo de calidad que garantiza al visitante que va a estar en alojamientos que cuidan el medio ambiente y que, al mismo tiempo, ofertan un servicio de calidad», declara.
La manera correcta»
Presisamente, El Abejaruco (Campillo de Ranas)y El Roble Hueco (Campillejo), son dos de las últimas cuatro casas rurales de la Sierra Norte que han conseguido el certificado de sostenibilidad turística en la última edición de Fitur.
Su gerente, Jorge Cruz, considera que la concesión de esta marca es, sobre todo, el reconocimiento «a un espíritu y a una coherencia ideológica». «Hemos puesto negro sobre blanco. Más allá de la importancia que tiene la cuenta de resultados para poder vivir de esto, hacerlo en comunión y mediante la integración con el entorno que nos rodea es absolutamente esencial para nosotros. Esta manera de hacer las cosas no es la más generalizada, sin embargo, sí creemos que es la correcta y la que poco a poco se irá imponiendo, por eso nos sentimos un poco como colonos de un modelo», afirma. A nivel práctico, Jorge Cruz explica que esta conciencia ecológica y sostenible la aplican en los procedimientos de limpieza de sus alojamientos, en la búsqueda de productos y personal local, en la recuperación de materiales, en la gestión de residuos e incluso en la información «amable» que trasladan a sus clientes acerca del espacio natural que van a visitar.