El Plan de Movilidad Urbano Sostenible (PMUS) de Guadalajara, aprobado en la Junta de Gobierno Local a principios de febrero, es un extenso documento que recoge un compendio de propuestas técnicas encaminadas a hacer más eficientes y saludables las formas de desplazamiento en la ciudad.

A nivel práctico, el PMUS, que viene a actualizar el ya redactado en 2015, plantea la puesta en marcha de medio centenar de medidas a corto, medio y largo plazo que tratan de priorizar la reducción del uso del transporte individual en beneficio de los sistemas colectivos y de otros modos de desplazamiento no motorizados así como de garantizar la seguridad vial, una buena gestión energética y la defensa del medio ambiente.

En concreto, este estudio se articula en una decena de Ejes Estratégicos de Actuación (Movilidad a pie, accesibilidad y espacio público; Movilidad en bicicleta y VMP; Movilidad en transporte público; Movilidad en vehículo privado motorizado; Gestión eficiente del aparcamiento; Distribución urbana de mercancías; Movilidad cero emisiones; Pedanías y conectividad territorial; Zona de Bajas Emisiones; y Gestión y promoción de la movilidad sostenible) de cara a lograr 26 objetivos específicos. Una parte importante de los mismos se centran en la necesidad de promover y facilitar los desplazamientos a pie en la ciudad por ser considerados la mejor y principal herramienta de transformación urbana. Según el diagnóstico que incorpora el PMUS, el 47 por ciento de los viajes realizados por los guadalajareños en la capital son a pie, frente al 49 por ciento de los mismos que se realizan en coche. El resto de las modalidades, incluyendo la bicicleta y el transporte público, registran cuotas inferiores al tres por ciento. 

Así las cosas, reducir el uso del vehículo particular ofreciendo una mejor experiencia de caminabilidad urbana entre barrios y, sobre todo, en la futura Zona de Bajas Emisiones es una de las máximas prioridades para hacer de Guadalajara una ciudad más sostenible y efectiva desde el punto de vista de la movilidad.

En este sentido, el PMUS plantea tres propuestas fundamentales: la creación de una red de itinerarios peatonales, la mejora de la movilidad peatonal en los entornos escolares y la implementación de un Plan de Accesibilidad General (ensanchamiento de las aceras, mejora de la nivelación de los pavimentos, eliminación de las aceras de todos los elementos que actúan como obstáculos, etc.).  

El concejal responsable de Infraestructuras y Transporte Público, Santiago López, corrobora el protagonismo que el peatón adquiere en el PMUS y, como consecuencia, «en las obras que se vayan haciendo en la ciudad». En este ámbito, López destaca el proyecto existente «para humanizar» dos de los ejes principales de la ciudad, el que une las glorietas de la Constitución y Bejanque pasando por el paseo de las Cruces y la Carrera y el que discurre a lo largo de la avenida del Ejército, desde la A-2 hasta el Palacio del Infantado. En la actualidad, la misma empresa que elaboró el PMUS se encuentra redactando un estudio de asistencia técnica que contemplará las distintas soluciones posibles para esta actuación, «y se elegirá la que consideremos más adecuada por parte del equipo de Gobierno y los técnicos con la intención también de optar a fondos europeos para su ejecución», señala el edil de Infraestructuras. «La idea es ir reconvirtiendo áreas de la ciudad, en base a lo que el PMUS indica, en espacios más accesibles, más peatonales y más estanciales», añade. Por otro lado, Santiago López destaca el «importante cambio» que supondrá la entrada en funcionamiento de la Zona de Bajas Emisiones para la movilidad en el corazón de la capital ya que el desplazamiento peatonal será la prioridad absoluta.  «Se trata de favorecer al peatón en distancias cortas y entornos más céntricos», apunta el edil.

Aparcamientos

 Por otro lado, López incide que la peatonalización del centro traerá consigo, irremediablemente, la limitación de las plazas de aparcamiento en superficie a residentes, comerciantes o personas con movilidad reducida, de ahí que sea necesario establecer nuevas alternativas para el estacionamiento de vehículos. «Es muy importante en el PMUS el establecimiento estratégico de los puntos susceptibles de ser en el futuro aparcamientos en el área colindante a la almendra de la ciudad», señala el concejal de Infraestructuras. El entorno de la plaza de toros, la calle María Pacheco (junto al parque de La Concordia), la avenida del Ejército, la Concatedral de Santa María o la calle Chorrón son varias de las ubicaciones que se proponen para esta red de aparcamientos periféricos. «La idea es que siga existiendo una oferta de plazas suficiente para que la gente pueda aparcar y, a partir de ahí, moverse a pie o en transporte público por el centro», explica. 

Aparte de favorecer los desplazamientos a pie, otra de las directrices que marca la hoja de ruta del PMUS es el fomento del transporte urbano, tan sólo presente en el dos por ciento de los desplazamientos que la ciudadanía realiza a diario. Tal y como confirma López, la reestructuración y mejora de las líneas de los autobuses urbanos es un proyecto preferente para el equipo de Gobierno en el que ya se encuentra trabajando de cara a la próxima licitación y adjudicación del servicio prevista para 2025. «Estamos con el estudio de un nuevo itinerario de líneas, de expediciones y de frecuencias para que todo se adapte a la Guadalajara de hoy mediante la incorporación de nuevas líneas y de mejores conexiones, por ejemplo, con los nuevos barrios como el Remate de las Cañas», argumenta.

Aunque la orografía de la ciudad es un gran hándicap para los desplazamientos en bicicleta, el PMUS también aboga por implementar varias acciones en este ámbito. Según Santiago López, a corto plazo, la intención del equipo de Gobierno es adecentar y establecer un mejor trazado en varios de los tramos del actual carril-bici y, por otra parte, recuerda que las nuevas vías tienen que contemplar zonas específicas para peatones y ciclistas o carriles de coexistencia. Por otro lado, está en proyecto mejorar la conectividad de las zonas verdes de la ciudad y la comunicación con las pedanías a través de itinerarios ciclistas y peatonales. 

El PMUS salió a información pública el pasado viernes 23, iniciándose un periodo de 45 días de información pública. Precisamente, para dar a conocer su contenido entre los colecitvos y asociaciones involucrados en la movilidad y la sostenibilidad de la ciudad y que éstos puedan realizar sus sugerencias y alegaciones si así lo consideran, el Ayuntamiento de Guadalajara convocará un taller de participación ciudadana que tendrá lugar el miércoles 13 de marzo, de 18 a 20 horas, en el Centro Municipal Integrado.
La inversión aproximada de las actuaciones que contempla el PMUS asciende a 36 millones de euros hasta el año 2034. A corto plazo (del año 2023 al 2026) se contempla una partida de 16 millones.