El Nacional de Tauromaquia renace en Toledo

Agencias
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El director Albert Serra, por la película 'Tardes de soledad', y los criadores de toros de lidia reciben 'ex aequo' el Premio que el Ministerio de Cultura eliminó de forma unilateral

Tras el fallo en la capital castellanomanchega, la entrega se hará el día 3 de marzo en Madrid. - Foto: Javier Pozo (La Tribuna)

El Premio Nacional de Tauromaquia resurgía ayer de sus cenizas en Toledo después de que el Gobierno de coalición de PSOE y Sumar lo fulminara como tal en mayo del año pasado, cuando el Ministerio de Cultura, capitaneado por Ernesto Urtasun, decidió amputar esta categoría entre los galardones. 

El mundo del toro no bajó los brazos y, a través de la Fundación Toro de Lidia, el Senado y nueve comunidades autónomas que apostaron por echar un capote a la fiesta nacional convocaron una renovada edición de este premio, que ayer recayó ex aequo en el director de cine Albert Serra, por su película Tardes de soledad, y en la Real Unión de Criadores de Toros de Lidia.

El presidente de la Fundación, Victorino Martín, informó del fallo  del jurado. En esta cita reconoció que la votación estuvo «muy disputada» y detalló que se habían realizado cuatro rondas de votaciones en la última de las cuales hubo un empate entre dos propuestas -con 12 votos cada una y un voto nulo-, por lo que el jurado optó por entregar un premio conjunto por primera vez desde que se creó este reconocimiento en 2013. La entrega oficial se realizará el 3 de marzo en un acto en el Senado.

De Tardes de soledad se valoró que es una obra que «explora la esencia de la tauromaquia como rito» y la figura del torero como «héroe contemporáneo y artista en constante compromiso con su arte», al tiempo que aborda «temas universales como el miedo, la muerte y la belleza».

El Premio Nacional también recayó en Real Unión de Criadores de Toros de Lidia por sus 120 años de actividad desde su fundación en 1905, un tiempo en el que ha desempeñado «un papel crucial en la defensa y promoción del toro bravo, contribuyendo al mantenimiento de una tradición ancestral».

El presidente de esta entidad, Antonio Bañuelos, aprovechó para resaltar la fortaleza del sector. Apuntó al respecto que el veto de Cultura ha tenido un efecto de «unión» en el sector porque «prohibir por prohibir no gusta y lo que hace es unir. Y se han unido representantes de millones de españoles», apuntó.