El Gobierno de Castilla-La Mancha emplea un modelo de acogida de menores migrantes «que da verdaderos resultados». Así lo ha destacado la viceconsejera de Servicios y Prestaciones Sociales, Guadalupe Martín. La Junta gestiona recursos de acogida para migrantes con un máximo de diez personas y con el objetivo de trabajar directamente con los menores para que tengan una «integración plena».
A preguntas de los medios de comunicación sobre la situación del reparto de menores migrantes Martín ha recordado que Castilla-La Mancha tiene sus recursos casi al completo. En concreto, tal y como ha detallado la viceconsejera, están al 97 por ciento de su capacidad.
No obstante, el Gobierno autonómico se ha comprometido a crear nuevos centros y plazas de acogida si fuesen necesario. Eso sí, Martín ha recordado que Castilla-La Mancha es una región «solidaria», pero para llevar a cabo este cometido es necesario que venga acompañado de financiación por parte del Estado.
Martín ha criticado los discursos de odio y xenófobos instalados en la sociedad y en algunas formaciones políticas que llevan a poner «etiquetas» que no corresponden a estas personas que buscan «el anhelo de una mejor vida».
Además, ha cuestionado que el Gobierno central haya tenido que recurrir al decreto para hacer el reparto, ya que las autonomías gobernadas por el PP se han negado a colaborar: «No es deseable gobernar haciendo un decreto y si se ha tomado esta medida es por la negativa permanente de algunas comunidades autónomas a participar en el sistema de acogida».