La mejor manera de explicar el cambio que supone pasar del antiguo Museo del Teatro de Almagro al nuevo Museo de las Artes Escénicas es pensar en que esa población ciudadrealeña estrena un nuevo museo. Acceder al Palacio de los Maestres de Calatrava implica pasar a un espacio que no recuerda en nada al que se pudo ver hasta 2023, cuando se cerró para las obras de renovación. La intención detrás de la obra es plantear opciones y diseñar un espacio museístico que sea capaz de condensar en sus paredes, el movimiento y la fuerza de las artes escénicas.
Por este motivo, lo primero que llama la atención es una gran pantalla, bajo la cual se encuentra el acceso a la exposición permanente del Museo, desarrollada como un gran cubo interior, repartidas en varias plantas, donde se ocupan todos los espacios y desde el que distribuyen las salas. Se arranca con las artes escénicas del siglo XXI, una de las novedades, y a partir de ahí se ofrece un viaje al visitante al teatro clásico, incluyendo un texto manuscrito de Calderón de la Barca, y a Grecia, que está expuesta sobre el techo con un audiovisual que impacta. A este recorrido, se suma un espacio dedicado a cómo se representa la naturaleza en las artes escénicas, el agua, el aire, la tierra y el fuego, como elementos claves que se representan sobre el escenario de un teatro. La visita concluye en el patio para ver la maquinaria empleada en la antigüedad y con una mirada a una de las grandes exposiciones que tuvo el Museo del teatro, la obra Fragmentos del alma.
Para hacer una idea de lo grande que es el patrimonio del Museo de Artes Escénicas, la directora, Beatriz Patiño, recuerda que solo se expone el 0,2 por ciento de las 17.500 piezas que hay en la actualidad. Esta cifra no para de crecer, sobre todo con el cambio de nomenclatura, al pasar de Museo del Teatro a albergar todas las artes escénicas, danza y circo, que se irán incorporando paulatinamente. «Siempre desde la calma, sin parar, porque requiere mucho estudio, mucha investigación y es un proceso muy lento», recordó Patiño.
El museo de lo 'efímero' vuelve a levantar el telón en Almagro - Foto: Rueda VillaverdePor este motivo, no hay en el nuevo espacio hueco para las exposiciones temporales. La intención, explicó Patiño, es llevarlas a la iglesia de las Bernardas, un espacio desacralizado que ya ha sido escenario en el Festival Internacional de Teatro de Almagro y que el Inaem ha alquilado. Además, el objetivo es que la exposición permanente esté viva:«Por la naturaleza de los materiales que contiene el museo va a tener un carácter rotatorio, sobre todo para garantizar la conservación», indicó Patiño, que apuntó la intención de cambiar lo expuesto cada seis u ocho meses. «Eso nos va a permitir que seamos una institución viva y que podamos ir conociendo los fondos que están depositados». La idea, recordó Ángel Martínez, comisario de la exposición permanente, es que si ahora hay un acto expuesto de una obra, después se exponga el segundo, y evitar que se pierda la intencionalidad con la que se ha diseñado este espacio.
La obra ha costado un millón de euros y han sido tres años, indicó Patiño, recordando que el proceso visual, desde que se cerró hasta su reapertura ha sido año y medio, y la otra mitad del tiempo se fue en el trabajo «sobre la mesa», con el estudio necesario y la investigación para saber por dónde enfocarlo.
Detrás del cambio hay multitud de nombres. Encabezados por los arquitectos Jesús Donaire y María Milans del Bosch, que dan un toque manchego a la obra, porque Donaire es malagonero. Además, se ha contado con la ciudadrealeña Rosa García Andújar, último premio de Figurinismo de la Asociación de Directoras y Directores de Escena de España, que es la encargada del vestuario del personal de sala. Mientras, detrás de los vídeos se encuentra el artista Álvaro Luna; de la sonoridad, Luis Miguel Cobo; de la iluminación, Juan Gómez Cornejo; y de las máquinas que pueden verse en el patio se ocupa Miguel Ángel Coso. Todos artistas de renombre para el cambio de la institución.
Tres imprescindibles del nuevo museo
El museo de lo 'efímero' vuelve a levantar el telón en Almagro - Foto: Rueda VillaverdeLa sala de Grecia. El audiovisual proyectado en el techo de esta sala será, sin duda, uno de los grandes atractivos de la visita al nuevo Museo Nacional. El vídeo recrea la historia clásica del teatro en una estancia donde se pueden contemplar trajes donados por Núria Espert y que empleó en Salomé.
Máquinas interactivas. El claustro del museo, donde acabará la visita, será un espacio para probar las máquinas realizadas por Miguel Ángel Coso.Un momento interactivo dentro de un museo en el que la visita se puede alargar por más de una hora si se ven todos los audiovisuales, se juega un rato con la obra Fragmentos del Alma y se pasa un largo rato girando manivelas para hacer funcionar cascadas, vendavales y 'provocar' lluvia.
Más fotos:
El museo de lo 'efímero' vuelve a levantar el telón en Almagro - Foto: Rueda Villaverde
El museo de lo 'efímero' vuelve a levantar el telón en Almagro - Foto: Rueda Villaverde
El museo de lo 'efímero' vuelve a levantar el telón en Almagro - Foto: Rueda Villaverde
Cartas y un incunable. El Museo Nacional de las Artes Escénicas permite admirar un elemento clave para la historia de Almagro, una baraja de naipes de 1729. Encontrada durante unas obras en 1953 inició la excavación que llevó a reabrir el Corral de Comedias en Almagro y que este Museo se ubique en la localidad. A esta curiosidad se suma un libro manuscrito, de 1624, con el auto El pleito matrimonial de Calderón de la Barca.