Como demuestran las estadísticas, los guadalajareños no son ajenos a la realidad de la sociedad actual cuya tendencia general es a tener cada vez menos hijos. Aparte de los condicionantes económicos desfavorables, otro factor decisivo que rodea esta problemática es la demora en la edad de la maternidad motivada, fundamentalmente, por razones laborales y socioculturales. Ese retraso conlleva, irremediablemente, que cuando las mujeres quieren buscar un hijo «sea más difícil o tengan que recurrir a técnicas de reproducción asistida», advierte María Jesús Cancelo, jefe del Servicio de Ginecología y Obstetricia del Hospital Universitario de Guadalajara. «Es una situación que nos preocupa mucho porque la biología no entiende de factores sociales ni laborales. Con la edad, los ovarios van sufriendo un proceso de envejecimiento que implica que cuando una mujer decide quedarse embarazada, muchas veces, no sea posible», explica.
Según detallan las estadísticas del INE, de las 1.502 guadalajareñas que fueron madres en 2023, el 35,3% (531) tenía entre 30 y 34 años; un 26% (391) se encontraba en la franja de entre 35 y 39 años; el 19,3% (290) se situaba entre 25 y 29 años; el 9,1% (137) tenía entre 40 y 44 años; el 8,1 de 20 a 24 años (122); el 1,1% (18) de 15 a 19; y el 0,8% (13) contaba con más de 45 años. Por tanto, la edad media de las mujeres que fueron madres en la provincia el año pasado se sitúa en los 32 años, idéntica cifra que la media nacional. «Que una mujer inicie su maternidad con 32 años es un poco tarde desde el punto de vista biológico», señala la doctora Cancelo. «Somos conscientes de que es complicado por la sociedad en la que vivimos, pero lo que nos gustaría como especialistas sanitarios y la recomendación que siempre damos es que la maternidad se lleve a cabo lo antes posible. Además, no hay que tener la idea de que las técnicas de reproducción asistida resuelven el problema al cien por cien porque no es así», añade.
Sin embargo, tal y como recuerdan los profesionales médicos, el problema no es sólo lograr el embarazo porque, una vez conseguido, «esa gestación tiene más riesgo tanto para la madre como para su hijo, simplemente, por el hecho de la edad». «Sabemos que con la edad se incrementa el riesgo de abortos, de alteraciones cromosómicas, aumenta la probabilidad de partos prematuros, de necesitar una cesárea o una instrumentación en el parto, etc. Todo eso está perfectamente analizado. Además, cuanto más mayor es una mujer, padece más enfermedades que se desarrollan con la edad como puede ser la diabetes, la hipertensión, puede tener miomas y no cabe duda de que todo eso incrementa el riesgo de ese embarazo», detalla María Jesús Cancelo.
Por todo ello, el cambio que ha experimentado la ciencia obstétrica en las últimas dos décadas ha sido muy relevante. «Ahora tenemos que atender embarazos con mucha más patología y eso hace que la Obstetricia se cada vez más compleja y que se necesite una mayor especialización de los profesionales que atienden a las mujeres embarazadas», analiza la doctora Cancelo.
«NOS COSTÓ»
Teresa es una de las guadalajareñas que fue madre, por primera vez, en 2023. Tuvo a su pequeño Lucas con 37 años y, aunque disfrutó de una gestación y un parto sin complicaciones, confiesa que tardó en quedarse embarazada más de lo esperado. «Nos costó más de un año y cuando ya pensábamos en recurrir a alguna técnica, tuve la suerte de quedarme embarazada», confiesa. Teresa decidió intentar ser madre cuando aprobó su oposición como funcionaria. «Antes no me lo planteaba porque para mí era una prioridad tener garantizada una estabilidad laboral y económica», comenta. Por ahora, esta madre primeriza no se plantea tener más descendencia. «Queremos disfrutar de Lucas un tiempo y luego ya se verá, aunque me veo un poco mayor para tener otro hijo», declara.