El mercado del automóvil cerró el pasado año con un total de 26.066 matriculaciones de turismos en Castilla-La Mancha. ¿Es una buena o una mala cifra? A priori no pinta nada mal, pues supone un considerable aumento en comparación con el año anterior. En concreto, han crecido un 19,3 por ciento, superando la media del país, que anotó un 16,72 por ciento. Todas las comunidades han registrado aumentos. Estos datos los facilita en un informe conjunto la patronal de concesionarios Faconauto, la  Asociación de Fabricantes de Automóviles y Camiones Anfac y el Grupo Autónomo de Vendedores de Automóviles, Camiones y Motocicletas Ganvam.

A modo de resumen, se podría decir que han crecido las matriculaciones de vehículos de gasolina, los de otros combustibles (aquí entran los eléctricos e híbridos) y han bajado los automóviles de diésel. 

El grupo de otros combustibles es el que agrupa mayor número de matriculaciones, con 11.852 el pasado año. Bajo esta denominación se incluyen los vehículos 'verdes', los que son totalmente eléctricos, híbridos (enchufables o no) o los de hidrógeno. Además son los que más han crecido en un año, con un incremento del 33,23 por ciento. A nivel nacional la subida ha sido similar y en todas las comunidades autónomas ha crecido.

En segundo puesto se quedan los coches de gasolina, con 11.189 matriculaciones de turismos en 2023. El incremento ha sido también notable respecto a 2022, con una subida del 26,73 por ciento, duplicando el aumento generalizado que ha habido en el país respecto a este tipo de vehículos. En casi todas las comunidades ha crecido, pero en Baleares, País Vasco y Ceuta y Melilla han disminuido. 

El diésel, en cambio, está en tendencia a la baja. En Castilla-La Mancha hubo 3.025 matriculaciones en 2023, lo que supone un descenso del  26,67 por ciento respecto al año anterior. A nivel nacional la caída ha sido del 15 por ciento y solo en Aragón hubo un mínimo aumento del 0,99 por ciento.