Aún no había alcanzado la mayoría de edad y ya apuntaba maneras de su pasión por el mundo rural y por seguir los pasos de su padre. Fernando Moreno Guisado (31 octubre de 1979) es un hombre de campo que disfruta con su trabajo como ganadero, tarea que comparte con la de alcalde de La Nava y, desde el pasado mes de octubre, con la presidencia de la Agrupación de Ganaderos de la Sierra Norte.   

Sustituye a Francisco García al frente de una agrupación que tiene más de 25 años de recorrido ¿Cuáles son sus retos?

Uno de mis retos pasa por lograr una mayor unidad del sector. En la unión está la fuerza, y nos jugamos nuestro pan. Además, nos preocupa mucho la excesiva burocracia que tenemos que afrontar y  a la que dedicamos al menos dos tardes a la semana; también los ataques del lobo al ganado y la subida de los precios de los piensos, la paja y los forrajes. Queremos precios justos.  

En la historia de la agrupación hubo parones, pero mi predecesor se movió bastante durante los últimos años. 

El 2023 se cerró bastante mal debido a la sequía. ¿Son mejores las perspectivas para este 2024?

Somos algo más de 40 ganaderos en la agrupación. El pasado año sufrimos una sequía tremenda que nos llevó a tener que gastar muchísimo dinero en piensos y paja. No recuerdo un año tan malo. Las perspectivas para este 2024 hay que verlas con distancia aún. 

En las movilizaciones convocadas estos días a título individual. y el próximo día 14 por las organizaciones agrarias, se habla mucho de los problemas y demandas de los agricultores y menos de las que tienen los ganaderos. ¿No están a la par en esta lucha?

Bajo mi punto de vista, el sector ganadero está muy mal mirado, a veces, hasta por los propios agricultores, y pese a que sin ganadería no hay agricultura. Nos sentimos apartados, marginados hasta por los propios agricultores. Es la verdad.  

Estos días, se oye más la voz de los agricultores en las tractoradas convocadas , pero los ganaderos lo estamos pasando bastante peor. Nos  pone zancadillas todo el mundo. Nos sentimos enfadados, indignados, la oveja negra del sector, y vamos a peor. Nos matan vacas por tuberculosos que luego dan un resultado negativo en el matadero; el lobo sigue atacando nuestro ganado; suben los piensos...Va todo el mundo a por nosotros. Atravesamos una situación muy complicada. Hay demasiada burocracia y restricciones. 

Es cierto que se les ve menos en las movilizaciones. Estarán presentes en la del próximo día 14, convocada por las organizaciones agrarias?

Estaremos ahí para reivindicar nuestros derechos. Unos iremos en nuestros camiones de ganado, otros en sus coches o remolques, y habrá quien acuda a pie.  

¿Qué futuro ve a su oficio de aquí a unos años?

Esto va mal. Este año estuve a punto de quitar las vacas y echar el cierre, lo tenía decidido. Y como yo, bastantes más. Ya veremos en qué depara todo. Quedamos cuatro en los pueblos y da la sensación de que nos quieren echar. Se hartan de hablar de la España vaciada y más se va a quedar si nos vamos. Y es que, cuando preguntamos por la enfermedad hemorrágica epizoótica, no obtenemos ninguna respuesta. Queremos vacunar y desde Europa dicen que no hay vacunas. No sé si será por la burocracia española, pero si esta primavera viene igual que la pasada, quito la explotación.   

Tengo 240 madres, más algunos terneros y cebadero. He tenido casi 70 vacas malas, se me murieron 14 y cuatro no he encontrado. Y aunque ahora con los fríos no hay casos, si viene igual la primavera que el año pasado, echo el cierre porque acabado de gastarme más de 6.000 euros solo en medicinas, eso sin contar las reses muertas. Lo que más me indigna es que desde el Gobierno regional me digan que me lo estoy inventando. No lo dicen con esas palabras, pero es la conclusión. 

¿Se está notando el relevo generacional que necesita el campo?

 Yo tengo 44 años y me considero joven, pero somos pocos. La media de edad pasa bien de los 55 años. 

Creo que algunos quieren que la Sierra Norte se quede solo para el turismo, y lo que no saben es que si los ganaderos nos vamos, todo esto terminará lleno de jaras.

¿Significa que no se sienten respaldados por las administraciones?

Nada, al revés. Y eso es lo peor. 

Supongo que habrá algo de positivo en que ya no tengan que trasladarse a llevar su ganado al matadero de otra provincia.

El matadero de Jadraque era una demanda del sector que ya es realidad gracias a un convenio. Hasta su apertura había que ir a Madrid o a Toledo, en función de los trámites. 

¿Cómo va el desarrollo de la marca de calidad 'Guadanorte' para la carne de vacuno?

Ahora es algo que está paralizado por falta de unión, de ahí que sea esencial unirse. Nuestra idea es hacer un cebadero comunitario para cebar todos juntos y comercializar bajo esta marca. 

Aquí prima el vacuno.

Si, hay ovejas, pero prima el vacuno. Se mantiene más o menos el número de cabezas con respecto a años atrás pese a que cada vez somos menos los ganaderos. En mi  caso, antes tenía 100 vacas y ahora tengo más de 200. 

¿Siguen los ataques del lobo en la comarca?

En mi caso, el pesimismo es tal que, pese a que he tenido ataques, llevo año y medio sin dar ningún parte. Me he negado. Los cuatro últimos ataques al ganado que tuve, hice la reclamación para pedir las ayudas y me los denegaron. Lo echaron atrás en Guadalajara, alegando que no eran del lobo pese a que el informe forestal había sido favorable.  Igual que ellos no colaboran, yo tampoco lo hago. Si no doy partes, les resultará más difícil saber por dónde está el lobo. En la agrupación tenemos un abogado a disposición de todos los ganaderos, aunque yo ya no lo uso.

¿Qué tiene que decir sobre el impacto de la ganadería en el cambio climático?

Sin nuestro ganado, la Sierra Norte de Guadalajara estaría perdida. A veces me da la sensación de que estorbamos y de que quieren dejar esta comarca para el turismo. No nos hacen ningún caso y eso de debe a que hay poca unión, por eso hay que trabajar por esa unidad.

¿Las nuevas tecnologías también han entrado de lleno en su sector con la presencia de pastores eléctricos o drones que controlan también el ganado?

Está llegando poco a poco. En mi caso, tengo ya un dron que me ayuda en el control del ganado y con él lo meto a los corrales. Lo malo sigue siendo el exceso de burocracia que tenemos que soportar.   

¿Supongo que el vallado virtual va supliendo la figura del pastor?

Con la ganadería extensiva ya no hay pastores, aunque este tipo de vallado sigue siendo caro. Es un oficio que tiende a desaparecer porque nadie quiere trabajar de lunes a domingo. Por eso, los rebaños de ovejas están desapareciendo. No se encuentra gente, ni españoles ni extranjeros.    

¿Aún se practica la trashumancia en esta comarca?

Poco o nada. Yo muevo a mi ganado, pero en camión.

¿Siguen siendo un sector muy masculinizado?

Van entrando mujeres. En mi caso, tenemos una titularidad compartida. Una buena idea.  

¿Se necesitan más embalses en esta provincia?

El agua es vida y cada vez nos hace más falta porque hay menos, también en la Sierra Norte, donde en el verano tampoco llovió. 

Por último, ¿se puede vivir hoy de la ganadería? 

Se puede sobrevivir, pero no vivir bien. A mi no me quedan mil euros de beneficio al mes, y eso siempre que no te venga un año malo como lo fue el pasado.