Las protestas de los agricultores franceses han afectado ya al menos a medio millar de empresas de transporte de Castilla-La Mancha y las consecuencias desde el punto de vista económico son pérdidas millonarias difíciles de cuantificar debido a la diversidad del producto.
Así lo ha señalado, en declaraciones a la Agencia EFE, el secretario general de la Federación de Empresarios de Transporte de Castilla-La Mancha (Fetcam), Francisco Javier Martín Cameno, quien ha cifrado en unas 500 empresas de la región que hacen transporte internacional las afectadas en los diez días que llevan ya los agricultores franceses movilizados y con cortes en las fronteras para que los vehículos no puedan hacer sus rutas y que los productos no lleguen a destino.
En todo caso, Martín Cameno ha precisado que cuando se habla de transporte internacional no hace referencia en exclusiva a transporte con destino a Francia, sino que las empresas tienen clientes en otros muchos países que consumen producto español pero el tráfico pasa por el país galo, al estar en el centro de Europa.
Asimismo, ha resaltado que el problema no es solo que los manifestantes franceses tiren la mercancía que se transporta o paralicen la ruta, sino que buena parte de esa mercancía es perecedera (productos hortofrutícolas, carnes o vegetales) así como productos farmacéuticos, y cuando llegan al cliente final lo echa para atrás por no ser entregado en plazo y se produce un problema añadido sobre quién se hace cargo de la mercancía.
Además, Martín Camero ha apostillado que los empresarios acuden a los seguros y en su "letra pequeña" dicen que no se hacen cargo de la mercancía cuando hay problemas de actos de vandalismo, por lo que al final "pagan el pato" los transportistas, que "siempre están en el centro de la diana de todas las protestas", ha lamentado.
La pérdida de productividad, de mercancía, el deterioro de la misma y los costes son, por tanto, muy elevados, ha subrayado, y lo que supone en Castilla-La Mancha se multiplica a nivel de España, ya que cada día transitan en exportación e importación desde España a la Unión Europea 17.000 traíleres de ida y de vuelta.
Fetcam pide al consejero de Fomento que presione al ministro y al Gobierno de España
El secretario general de Fetcam ha reivindicado una solución "ya" a este problema y ha pedido al consejero de Fomento, Nacho Hernando, que "presione" al ministro de Transporte y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, para que junto al ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación José Manuel Albares, y Presidencia, se dirijan a la Unión Europea (UE) y se pongan "al habla" con el país galo para buscar una solución.
No obstante, ha apuntado que imagina que se habrán puesto a trabajar en este asunto, pero ha incidido en que tienen que dar "un zapatazo en la mesa" porque "no es de recibo" que empresarios del transporte lleven 18 días por Europa "dando vueltas y haciendo vida en una tractora".
A modo de ejemplo, ha referido que la semana pasada hubo empresas que estuvieron atrapadas en Perpiñán durante cinco días y que los conductores lo único que quieren es volver a su casa a descansar y hacer compatible su actividad con la conciliación familiar, así como ha contado que a una empresa de Ciudad Real le tiraron 24.000 litros de vino blanco y el seguro le ha dicho que no se hace cargo.
En este punto, ha opinado que se trata de un problema de Francia a nivel interno pero se ven afectados los trabajadores españoles e italianos, mientras que los agricultores galos piensan en el endurecimiento de las protestas y quieren, incluso, tomar París, ante lo que Martín Cameno ha manifestado: "Tienen todo el derecho a manifestarse, pero que dejen trabajar a la gente".
Las medidas en Castilla-La Mancha pasan por "ralentizar" los envíos
Ante esta situación, Fetcam ha pedido a los productores "ralentizar" los envíos y esperar a ver qué ocurre, pues corren el riesgo del deterioro o pérdida de la mercancía transportada.
La idea, ha explicado Martín Cameno, es que aguanten unos días y vean la evolución de la situación, al tiempo que se baraja la posibilidad del tránsito marítimo, si bien esta opción también es complicada por la alta demanda en los últimos días.
También se ha planteado en los últimos días, ha añadido, tratar de evitar las rutas principales y optar por vías secundarias, aunque esto alarga el trayecto y se ralentiza mucho más por las colas de camiones en las carreteras.
Con todo, Martín Cameno ha defendido que el compromiso del transporte castellanomanchego es cumplir con los clientes y tratar de dar una solución también al productor y que, aunque con días de retraso, la mercancía transportada pueda llegar a su destino.