Rebollosa de Hita es una sorpresa en sí misma. Nada hace sospechar cuando uno toma la suntuosa carretera que parte del parque logístico de Torija y que conduce hasta este recoleto pueblo que lo que va a descubrir ante sus ojos es una estampa increíblemente
embaucadora. Y es que la magnitud y belleza del paisaje que rodea esta pequeña pedanía alcarreña es un privilegio del que pueden presumir muy pocos lugares cercanos a la capital. Desde la plazuela de la iglesia parroquial, el punto más elevado del casco urbano, la panorámica es igual de impresionante regalando un precioso valle y la oportunidad de diferenciar nada menos que 19 pueblos.
La Plaza Mayor es el punto perfecto para iniciar un paseo por esta pedanía de Torija. La maravillosa fuente que preside este ágora, datada en 1886, es uno de los elementos más interesantes de la localidad. Una de las dos pilas tiene el borde más plano y la otra tiene una inclinación de 45 grados porque es donde las mujeres apoyaban sus losas y lavaban la ropa a modo de lavadero. La Plaza Mayor es también uno de los espacios más frecuentados por los numerosos niños que frecuentan la localidad durante las vacaciones y los fines de semana al estar muy cerca del frontón municipal y de un pequeño parque infantil.
Rebollosa de Hita es un pueblo recogido y coqueto, en el que todo es cercano y familiar. Por ello, apenas se tarda un par de minutos en llegar hasta la plaza de la Acacia, el principal punto de encuentro y reunión de los rebolloseros al ubicarse en ella el único bar del pueblo, de concesión municipal. Haciendo gala de su nombre, esta pequeña plaza luce una hermosa acacia con casi 120 años de vida que aporta una espléndida sombra para soportar los rigores estivales. Otra plaza, la de la Morera, luce otro de los ejemplares arbóreos más significativos de la localidad.
La siguiente parada de interés es la iglesia parroquial de la Virgen de la Asunción, en lo más alto del pueblo. Construida en el siglo XVI sobre una estructura mudéjar anterior, está construida en su totalidad por sillares y sillarejos, además de ladrillo, y luce un pórtico soportado por una pareja de columnas. De estilo románico popular, posee un interior muy interesante desde el punto de vista artístico, sobre todo, a raíz del reciente descubrimiento de las pinturas y los arcos de ladrillo que estaban ocultos bajo una capa de cal. Entre otras imágenes, el templo alberga el Cristo, patrón del municipio y cuya festividad se conmemora el 14 de septiembre, y San Roque, otro de los santos más venerados por los vecinos y que es motivo de una semana de fiestas y algarabía.
criado del val. Una de las curiosidades que encierra la historia de Rebollosa de Hita es su vinculación con el profesor Manuel Criado de Val. El padre del creador del Festival Medieval de Hita era natural de este pequeño pueblo y, siendo niño, Criado de Val pasó largas temporadas en la casa paterna, desde cuya puerta podía contemplar unas magníficas vista del cerro que caracteriza el paisaje hiteño. Así fue como nació el amor y la entrega que el conocido filólogo siempre sintió por estas tierras alcarreñas y que, años después, le hicieron idear y promover esta fiesta de Interés Turístico Nacional.