Los alcaldes del PP de Castilla-La Mancha han declarado la guerra al canon del agua. Hoy se han concentrado del Palacio de Fuensalida, sede de Presidencia, para protestar por este gravamen al consumo del agua que plantea la Junta. Precisamente a unos metros se estaba debatiendo en las Cortes la Ley de Medidas Administrativas con la que se recupera este canon del agua, que hoy mismo se votará. Los diputados del PP votarán que no, pero esta iniciativa saldrá adelante seguramente con los votos de la mayoría socialista en el Parlamento.

Los alcaldes del PP se quejan de que sus vecinos tengan que pagar un nuevo gravamen por el consumo del agua, que calculan que como mínimo partirá de 30 euros al año por hogar. También alertan del perjuicio que puede suponer para locales que utilizan bastante agua como bares o peluquerías o para la industria. Además los ayuntamientos tendrán que pagar también el canon por el consumo que hacen para piscinas, riego o instalaciones municipales como las educativas o deportivas. Calculan que para las capitales y grandes ciudades de la región este nuevo impuesto puede rondar el millón de euros al año. Para más inri se quejan de que los ayuntamientos tendrán que hacer toda la gestión y recaudar este canon entre sus vecinos para luego dar el montante a la Junta, pues la ley establece que solo el 25 por ciento de lo recaudado volverá a los municipios. 

"Venimos aquí a defender por un lado nuestra autonomía municipal y por otro a nuestros ciudadanos, a nuestros vecinos", proclama el alcalde de Ciudad Real, Francisco Cañizares. Denuncia que Page lo ha hecho muy mal con los ayuntamientos: "No se han sentado con nosotros, no nos explican las cosas, no nos dicen cómo se va a gestionar el dinero posteriormente".

Los alcaldes del PP declaran la guerra al canon del agua - Foto: Javier Pozo

La alcaldesa de Guadalajara, Ana Guarinos, se mostró preocupada por el impacto que puede tener para las empresas sobre todo por el agravio comparativo con la cercana comunidad de Madrid, que no cobra este canon. Además se queja de que el Gobierno solo tiene un afán recaudatorio y más en el caso de su ciudad: "En Guadalajara la Junta no nos suministra el agua ni nos depura el agua, por esos servicios ya pagan los ciudadanos de Guadalajara". Critica que "Emiliano García-Page quiere que volvamos a pagar otra vez".  

El alcalde de Hellín, Manuel Serena, contó que su municipio tiene 30.000 habitantes y doce pedanías y presume de estar haciendo bien las cosas en temas de agua. "Tenemos una toma de agua histórica en el río Mundo, el agua que depuramos la volvemos a utilizar para regadíos. Cumplimos con la economía circular", asegura. Llevó a la concentración un recibo del agua para demostrar que los hellineros ya pagan un canon de amortización de las infraestructuras del agua. "Las que estamos haciendo, las hacemos y las pagamos los hellineros", insistió. Por eso no entiende este gravamen porque irá a la "caja común" y duda de que tenga un beneficio para sus vecinos a la hora de hacer inversiones.

El alcalde de Fuensalida, José Jaime Alonso, le preguntó a Page si "él considera que subir el agua a los castellanomanchegos es la única medida que puede adoptar para incentivar el ahorro de consumo del agua". Sugiere que la Junta ya podría ayudar a cambiar las redes de los municipios, que "hay muchísimas fugas  y se pierden cientos de metros cúbicos de agua" o a tener redes de separación de agua de lluvia para luego utilizarla para baldeo o riego.

El alcalde de San Clemente, Tomás Martínez, pide al Gobierno regional que trabaje en fórmulas de entendimiento para que no se materialice este canon. "Tenemos que dar la cara al ciudadano de cómo esa subida la tenemos que cobrar nosotros", se lamenta. El alcalde de Seseña, Jaime de Hita, añade que el momento es además malo. "Estamos luchando por mejorar la financiación local, vemos que los dineros van a hacia otra parte de España y a los castellanomanchegos nos vuelven a obligar a rascarnos el bolsillo", se quejó.

El alcalde de Puertollano, Miguel Ángel Ruiz, echó en falta la presencia de alcaldes de otros partidos políticos. "El Gobierno de Castilla-La Mancah se va a quedar más del 75% de ese impuesto que vamos a recaudarle los a yuntamientos para la Junta y a nosotros, en el mejor de los casos, nos van a revertir un 25%", clamó ,"yo creo que no es justo". 

Este canon se aprobó hace dos años en la Ley de Aguas de Castilla-La Mancha, pero el Gobierno regional decidió dejarlo en suspenso ante la incertidumbre económica que generó el estallido de la guerra de Ucrania. Ahora quiere levantar ese suspenso temporal del canon y la portavoz del Gobierno regional ya ha aclarado que se prevé que entre en vigor a partir del 1 de enero del año que viene.