El Gobierno de Egipto ha afirmado este lunes que Israel "no ha adoptado una posición" que permita la apertura del paso de Rafah, en la frontera con la Franja de Gaza, y ha acusado a las autoridades israelíes de "impedir" la entrega de ayuda al enclave palestinos, tras diez días de guerra entre el Ejército israelí y el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás).
"Desafortunadamente, el Gobierno de Israel no ha adoptado una posición para permitir la apertura del paso de Rafah en el lado de Gaza", ha dicho el ministro de Exteriores egipcio, Samé Shukri, que ha denunciado que "Israel está impidiendo que la ayuda entre en Gaza".
Así, ha dicho que "Egipto ha intentado desde el inicio del conflicto mantener abierto el paso de Rafah" y ha destacado que El Cairo "trabaja con organizaciones internacionales" para "entregar ayuda urgente para reducir el sufrimiento de los civiles en Gaza".
"Debemos centrarnos en este momento en detener una escalada", ha manifestado Shukri durante una rueda de prensa junto a su homóloga francesa, Catherine Colonna, tal y como ha recogido el diario egipcio Al Ahram.
Las palabras de Shukri han llegado horas después de que la oficina del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, negara la existencia de un acuerdo para un alto el fuego en el sur de la Franja de Gaza para permitir la reapertura del paso de Rafá de cara a la evacuación de extranjeros y la entrega de ayuda humanitaria al enclave.
"En estos momentos no hay un alto el fuego para la entrega de ayuda humanitaria en la Franja de Gaza y la salida de extranjeros", ha señalado, mientras que Hamás ha indicado que "no hay verdad" en las informaciones sobre este punto.
Naciones Unidas y numerosas organizaciones no gubernamentales han alertado del grave deterioro de la situación humanitaria en el enclave a causa de los bombardeos de Israel y el cerco impuesto tras los ataques lanzados el 7 de octubre por Hamás, que se saldaron con cerca de 1.400 muertos.
Por su parte, las autoridades palestinas han cifrado en cerca de 2.750 los muertos y en más de 9.700 heridos por los bombardeos israelíes contra la Franja de Gaza, entre especulaciones sobre el posible inicio de una ofensiva terrestre por parte del Ejército de Israel contra el enclave.