Más de 30.000 vecinos y un total de 35 municipios de pertenecientes a la Mancomunidad de Aguas del Río Tajuña, entre los que se encuentran localidades como Yebes, Horche o Mondéjar, llevan desde el pasado domingo con problemas en el abastecimiento de agua potable debido a la DANA y teniendo que ser abastecidos por cisternas o con el agua que a algunos les queda en sus depósitos.

Desde las lluvias intensas del pasado fin de semana el río bajo con muchos sedimentos y esto ha conllevado que desde el pasado domingo la mancomunidad no pueda dar suministro de agua potable a sus municipios, una situación que el portavoz de Vox en las Cortes de Castilla-La Mancha y presidente de la formación en Guadalajara, Iván Sánchez, atribuye a la falta de previsión del Aguas de Castilla-La Mancha y del propio órgano mancomunado.

Así, "tenemos a 30.000 vecinos sin agua potable en sus casas", señala Sánchez, lamentado que a muchos se les cortara el suministro sin previo aviso desde la Mancomunidad. 

En una comparecencia ante los medios de comunicación Sánchez ha elogiado el trabajo realizado por la Diputación Provincial llevando cisternas a los pueblos que lo necesitan para el consumo humano pero el problema es que no se sabe cuando se resolverá la situación y mientras tanto los habitantes de estas localidades no pueden ducharse las peluquerías no pueden abrir y muchos establecimientos tienen problemas.

Para Sánchez, el problema radica en que desde la mancomunidad deberían haber optado por realizar una toma de agua desde el embalse de la Tejera para evitar una situación que se repite "con bastante asiduidad". 

Aguas de Castilla-La Mancha es la empresa que da el suministro de agua por tubería a la Mancomunidad del Tajuña, suministro que tuvieron que cortar porque el líquido elemento salía "marrón", y "no sirve ni para el consumo ni tampoco para ducharse". 

Para el portavoz del grupo parlamentario, este tipo de situaciones se deben, entre otras cosas, a que ahora no se pueden tocar los cauces de los ríos ni se puede tener agua embalsada en cantidad y calidad suficiente, asegurando que estas lluvias que ahora se llaman DANA es lo que antes se conocía como gota fría. 

"Lo más grave de esto es que aún no se sabe cuánto tiempo podrán estar todos estos vecinos sin agua porque el río baja muy turbio y no se prevé que en 48 horas se pueda restablecer el servicio a los vecinos. Ojalá me equivoque", ha subrayado, lamentado que este tipo de situaciones se den porque no hay la capacidad de reacción para ello.