El gabinete didáctico del Museo de Guadalajara comenzó a funcionar en abril de 2022 a iniciativa de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, con el propósito de que los ciudadanos, sobre todo los estudiantes, conozcan la riqueza de las piezas que atesora a través de visitas y talleres divulgativos. La responsable de este nuevo departamento es Laura Quiles, licenciada en Historia del Arte y docente del IES Brianda de Mendoza en su anterior etapa profesional. El nuevo enfoque educativo que esta entusiasta profesora ha aportado al Museo de Guadalajara fue reconocido el pasado 15 de noviembre con uno de los galardones que el Gobierno regional concedió con motivo del Día de la Enseñanza.
En general, ¿cuáles son los principales objetivos del gabinete didáctico del Museo de Guadalajara?
El objetivo principal es acercar el Museo de Guadalajara a la ciudadanía y a un montón de grupos sociales, no sólo con criterio estético sino también desde el conocimiento más profundo de todo lo que atesora y el trabajo que desarrolla. El Museo es una institución de educación no formal, pero ofrecemos a un abanico muy amplio de actividades didácticas. Vienen grupos escolares desde la etapa de Infantil hasta la Universidad. También trabajamos con grupos de jubilados, con usuarios de centros de día, con gente de asociaciones culturales, clubes de lectura y colectivos de todos los ámbitos.
¿Qué programas desarrollan desde este gabinete?
La idea principal es que hay que conocer muy bien los fondos del Museo para saber con lo que se cuenta. Esa labor yo la hago más visible, pero dependo de un equipo que tiene un conocimiento profundísimo de las obras y entre todos hablamos de los itinerarios que se pueden preparar. En estos momentos, ofrecemos una quincena de visitas-talleres que hemos ido configurando poco a poco. Tienen una duración aproximada de una hora y media, pero nos adaptamos al tiempo del que disponga cada grupo. La mayoría de estos itinerarios han sido creados a iniciativa propia, pero alguno también ha surgido a petición de otros centros porque siempre estamos abiertos a cualquier propuesta. Tienen temáticas diversas. Por ejemplo, en 'Los poderes del Museo' contamos qué hace un museo (investiga, restaura, divulga, organiza exposiciones, etc.) mediante la selección de varias obras de la colección permanente. 'Arte que te quiero verde' es un itinerario en el que se han escogido obras con las que se pueden abordar temas medioambientales. Luego está 'La huella de lo clásico' sobre la influencia de la cultura grecolatina. 'Veo, veo en el Museo de Guadalajara' es una actividad infantil que persigue una mejor percepción de las obras del arte a través del popular juego del 'Veo, veo'. También destacaría 'Educando tu mirada', que está enfocado a los estudiantes que se van a examinar de la PAU. Además, con motivo del Día Internacional de la Mujer surgió 'Itinerario en Femenino, con M de Mujer con M de Museo'.
Laura Quiles Cerdera es la responsable del gabinete didáctico del Museo de Guadalajara. - Foto: Javier Pozo¿Hay alguno que sea más demandado por los centros educativos?
Tiene bastante peso el general que incluye también la visita al Palacio del Infantado, pero 'Arte que te quiero verde' está teniendo mucho éxito desde que lo lanzamos porque está muy relacionado con el currículo que tienen los colegios incluso varios grados de Formación Profesional.
¿Cuántas personas pasan al año por estos programas didácticos?
Estamos terminando la memoria de 2024, pero en 2023 fueron unas 3.000 personas.
¿Hay alguna pieza que sorprenda entre los participantes?
Los grupos escultóricos de Luisa Roldán llaman mucho la atención porque es la única mujer artista, aparte del colectivo de mujeres de Guadalajara con su obra 'El Grito', que tiene presencia en nuestro museo. También se interesan mucho por la pintura del siglo XIX que trata sobre la muerte de Lucrecia. Asimismo, las botargas despiertan mucho su curiosidad y se sorprenden de todo el material de Arqueología que tenemos, de que todo eso proceda de la provincia de Guadalajara. Además, les gusta mucho conocer la labor de investigación que se realiza.
Laura Quiles Cerdera es la responsable del gabinete didáctico del Museo de Guadalajara. - Foto: Javier Pozo¿Tenemos un museo provincial de calidad?
Tenemos un museo de una calidad y riqueza extraordinaria. Yo que soy historiadora del Arte, lo puedo afirmar con rotundidad. Hay obras de Alonso Cano, de Luisa Roldán, de Bartolomé Román, de Tristán –discípulo de El Greco–, de Rómulo Cincinato.... En el plano de Arqueología, todo lo que se encuentra en la provincia, se estudia en el Museo, se cataloga y luego los investigadores aportan su saber. Hay material de celtíberos, de carpetanos, del mundo romano... La gente se sorprende muchísimo de la calidad de nuestro museo y valora que la exposición permanente 'Tránsitos', que aúna Bellas Artes, Arqueología y Etnografía, tenga un discurso tan bien hilado.
¿Qué otras iniciativas se desarrolla desde el gabinete didáctico?
Elaboré una guía didáctica, una especie de cuentecillo, sobre Luisa Roldán para que se conozca la gran valía que tuvo esta escultora, de la que a mí ni siquiera me hablaron cuando hice la carrera. Es también es una especie de reflexión sobre la necesidad de que se estudien las mujeres en el Arte. Tenemos otra publicación a la espera de ver la luz dedicada a Alejo Vera. Por otro lado, organizamos las visitas guiadas que se ofertan a la ciudadanía para conocer con más profundidad las exposiciones temporales que llegan periódicamente al museo.
De esas visitas a exposiciones temporales, ¿hay alguna que haya tenido más éxito?
La exposición 'Instantes decisivos', que trajo fotografías icónicas que nadie se espera ver en Guadalajara. fue muy demandada. Y, últimamente, también tuvieron una acogida magnífica las visitas a la exposición 'En el principio. Historias del Antiguo Testamento' del gran pintor flamenco Frans Francken II.
Laura Quiles Cerdera es la responsable del gabinete didáctico del Museo de Guadalajara. - Foto: Javier Pozo¿Son actividades gratuitas?
Son actividades gratuitas porque, a día de hoy, la entrada a los museos gestionados por la Junta de Comundiades es gratuita. En principio, está anunciado hasta el 31 de diciembre, pero a mí me gustaría que siguieran siéndolo porque partimos de lo público. Soy de la opinión de que la cultura no tiene que costar, tiene que ser accesible para todos y todas. Para participar, simplemente hay que llamar al Museo o escribir un correo electrónico. Me lo remiten, se agenda el día y la visita que el grupo quiere hacer.
¿Quién no conoce su patrimonio está abocado a ignorarlo?
Claramente. Es importante que los propios guadalajareños conozcan su patrimonio. De hecho, creo que hay mucha gente que no entra al Museo de Guadalajara porque se deja deslumbrar por el edificio. O que lo visitó cuando iba al colegio hace un montón de años y no ha vuelto a ir. Les animo a que lo hagan porque el cambio ha sido impresionante. Entre los turistas también ocurre que se quedan en el edificio, ven el Patio de los Leones y se van. Y es una pena porque se pierden cosas muy interesantes.
¿Es importante inculcar el conocimeinto de los museos desde edades tempranas?
Una compañera jubilada me decía que los museos son el sitio donde van los niños de pequeños, se alejan de adolescentes y vuelven cuando son adultos. Tenemos el hándicap de la adolescencia, es la edad más difícil y la que tenemos que hacer más esfuerzo para enganchar. Porque los pequeños lo tienen clarísimo. Vienen, les gusta y disfrutan. Y, claro, los niños que van a los museos serán adultos que también vayan. Eso está clarísimo.
¿Qué es lo que más le gusta de su nueva responsabilidad?
Me parece muy entretenida porque hago de todo un poco. Es muy gratificante saber que estamos haciendo una labor importante de difusión. Por otro lado, soy profesora de Secundaria y nunca había estado con niños de Primaria ni de Infantil y me encanta. Es increíble la creatividad y la imaginación que tienen. También me gusta mucho el tiempo para documentarme porque, en función del nivel de cada visita, tengo que prepara un discurso u otro. No es lo mismo para un niño de Primaria, con toda la calidad y conocimiento que se da, que un estudiante universitario. Me tengo que documentar y empapar mucho de las obras, eso es una fuente inagotable.
A raíz de su incorporación laboral en el Museo de Guadalajara, ¿qué ha descubierto?
He descubierto la magnífica labor que realiza todo su equipo. Todos los días aprendo muchísimo de mis compañeros.
Personalmente, ¿cuáles son sus obras favoritas?
Estudié Historia del Arte, entonces, la parte que más me gusta es la de Bellas Artes. Me encantan las Roldanas y el sepulcro de doña Aldonza de Mendoza. Lo cierto es que, según voy conociendo más de cada obra, voy sumando. El Ataifor de Guadalajara, que una pieza andalusí fundamental que ha investigado mi compañero Miguel Ángel, es también un orgullo.
Además, en el último año se han incorporado importantes adquisiciones a la colección permanente del museo...
Sí y son dos obras bellísimas. Tanto la tabla flamenca de La Magdalena como el retrato de Luisa de Mendoza y Mendoza de Ricci son preciosas. Y conocer su historia, todavía más. Las exposiciones temporales son muy importantes para favorecer las visitas, pero estas obras que el Ministerio adquiere pensando específicamente en el Museo de Guadalajara son también fundamentales porque enriquecen su colección permanente.
¿Qué opina del proyecto 'Prado Extendido' que hay planteado para el Museo de Guadalajara?
Me parece un proyecto muy interesante porque, sin desmerecer lo que tenemos, todo lo que sea complementar y ampliar es positivo. Estoy deseando que se haga realidad. De hecho, ya me estoy documentando sobre esas posibles obras que van a llegar a Guadalajara procedentes de los fondos del Museo del Prado.
¿Qué supuso para usted el reconocimiento que le otorgó el Gobierno regional en el Día de la Enseñanza?
Una sorpresa, no me lo esperaba nada. Por dentro y por lo que me decía la gente, pensaba que lo estaba haciendo bien, pero cuando te lo reconocen públicamente personas de tus sector profesional, pues es muy ilusionante. Ahora ya no puedo decaer (risas).