Con una estupenda entrada en el salón de actos de la Casa de la Cultura de Cabanillas del Campo, dos artistas, ambos vecinos de la localidad, la escritora Ana Yela y el músico José Luis Serrano, presentaron en la tarde del sábado 9 de noviembre el recital poético "Anafragmas sonoros", fruto final de una colaboración que comenzó hace tres años, y que básicamente se resume en el recitado de los magníficos poemas de Yela amenizados por la música de estilo "new age" de Serrano, todo ello acompañado de bellas proyecciones audiovisuales, que dan redondez al espectáculo. A la presentación asistió en representación del Ayuntamiento la concejala de Cultura, Rosa María García.
Los "anafragmas" son precisamente los textos salidos de la pluma de Yela, prometedora escritora que acaba de publicar su primer poemario hace pocos meses ("Con la lengua imparable"), y que también ha ganado recientemente concursos como el Certamen de Relatos Breves de la Biblioteca León Gil de Cabanillas, en su pasada edición, y el Concurso de Microrrelatos del Ayuntamiento de Guadalajara. Con la colaboración del prestigioso músico e ingeniero José Luis Esteban, un magnífico intérprete de música melódica, se convierten en "sonoros", al estar acompañados de bellísimas melodías a la guitarra, de inconfundible sonido "new age".
"Primavera" fue el poema con el que se inició este recital, en el que los artistas ofrecieron una treintena de piezas durante algo más de una hora. La mayoría de los temas se presentan con los dos artistas al unísono, aunque también hubo tiempo para algunas canciones en solitario de José Luis Esteban (como su tema "Sin palabras"), y también para algunos recitados de Yela, sin música de fondo. Así fueron sucediéndose las piezas: "Entre tu risa y mi pelo", "Los besos al aire", "Renacer", "Refugio", "Dame tu fe", "Un pulpo en mis zapatos"… hasta culminar con el maravilloso poema "Voy a quemar los periódicos". Son textos que combinan un contenido inequívocamente social, con la muy presente temática amorosa, eje central del último libro de Yela, y siempre textos que desprenden dulzura y sutileza. El recital suponía además la presentación de un trabajo conjunto fraguado a lo largo de los últimos tres años, y que va a ver la luz en forma de un álbum conjunto en los próximos meses.