Hace poco, celebrábamos el Día de la Madre, una jornada dedicada a aquellas que dan vida, a una figura importante para todo Ser Humano. En Guadalajara, desde hace 13 años, existe una asociación, Red Madre, que tiene como fin ayudar a las mujeres que se enfrentan a un embarazo inesperado y que son vulnerables por diferentes motivos. Económicos, pero también sociales, laborales y afectivos. En algunos casos, tienen dudas sobre la idoneidad de llevar a término su embarazo. Aquí, reciben información y apoyo antes de tomar una decisión irreversible.
«Cuando viene la mujer, le damos esperanza. Necesita a alguien que les diga, estoy contigo, te acompaño, estoy contigo desde el minuto cero y no estás sola. Merece la pena proteger algo tan maravilloso como es la vida. Es verdad que la sociedad en general, no invita a ello. Para nosotros, ser madre es una buena noticia. Aunque surja en un momento inesperado, es una buena noticia para la madre y para la sociedad. La familia es el germen de la sociedad», señala Ester Martínez, trabajadora de Red Madre.
Muchas mujeres llegan a Red Madre con muchas dudas sobre el aborto: «Si las mamás que vienen aquí, lo hacen con dudas y deciden no seguir adelante con el embarazo, les respetamos. Pero, aunque el médico, tus amigos o tu familia te planteen el aborto, para elegir en libertad, tienes que conocer todas las opciones. Y nuestra opción es por la vida. Acompañamos sin invadir la intimidad de la mamá ni sus creencias. Creemos que libertad y maternidad no están enfrentadas», argumenta Ester Martínez.
Red Madre cuenta con un teléfono móvil de atención de 24 horas para embarazadas vulnerables. - Foto: Javier PozoHay una pequeña parte de la sociedad que no entiende su labor de protección de la vida: «Existe la opción de no tener a tu hijo pero tiene que existir la opción de sí tenerlo. No somos ningunas fanáticas, no juzgamos a nadie, ni perseguimos. Vienen mamás que han abortado y también se les apoya. Estamos para ayudar. Escuchamos algún comentario de algún político diciendo que no sabe para qué estamos y que hay otras necesidades más urgentes. Creo que las mujeres tienen derecho a decidir si quieren tener a sus hijos. Hemos recibido muchísimo apoyo pero hay una parte que no nos entiende», apunta Gloria Odriozola, voluntaria desde hace diez años y secretaria de la Junta Directiva de la organización de Guadalajara.
Acompañar y escuchar. Este el principal cometido de Red Madre. La atención a la embarazada se presta desde distintos ámbitos. «Hacemos un traje a medida a cada mamá», define Ester, quien detalla que se trabaja en áreas como el coaching para mejorar la autoestima, formación en educación maternal o afectivo-sexual, apoyo a la lactancia materna, o también cuidados e higiene del bebé.
En toda esta labor, es fundamental la figura del voluntario. Entre 15 y 20 personas colaboran con su tiempo o su labor profesional. Cuentan con médicos, abogados, coach, profesores, ginecólogos, psicólogos y, desde hace un año, con una matrona, María Jesús Armijos: «Hay mucha gente joven que necesita orientación prenatal y postparto. Estoy aportando un granito de arena. Conocí Red Madre y me encanta mi profesión», cuenta esta matrona que habitualmente pasa consulta en Manantiales y que, en esta asociación, atiende tanto de manera individual, educación maternal, como en grupo para impartir clases de preparación al parto.
Red Madre cuenta con un teléfono móvil de atención de 24 horas para embarazadas vulnerables. - Foto: Javier PozoEl otro pilar fundamental de Red Madre es el socio. Actualmente, son 80 personas muy comprometidas que aportan una cuota mensual y complementan con ayudas puntuales en momentos de necesidad.
«Tenemos un montón de sueños y de proyectos pero que no podemos llevar a la práctica porque no tenemos dinero de manera fija. Necesitamos gente que nos ayude a ayudar, que le guste la maternidad y que piense que es un bien», solicita Ester Martínez.
Gracias a la generosidad de los socios se financian pagos puntuales del alquiler, cuotas de guardería cuando la madre encuentra un trabajo, vacunas que no están financiadas, además de la compra de material. Por el nacimiento, la madre recibe una canastilla con productos básicos para el cuidado del bebé y de sí misma. Además, la asociación pone a su disposición material como cunas, sillas o carros, también ropa de premamá y de bebé donados por particulares.
En pandemia, gracias a la solidaridad y generosidad de socios y voluntarios, atendieron muchas necesidades acuciantes y contaron con la colaboración de Protección Civil y unos voluntarios de una empresa de alarmas para poder repartir el material que necesitaban las madres por toda la provincia.
Red Madre está abierta a cualquier colaboración pero, sobre todo, quieren retomar es el acompañamiento personal a las mujeres en el día a día. Alguien que escuche sus demandas y necesidades.
Como recursos económicos, para este año, cuentan con una subvención nominativa de 5.000 euros del Ayuntamiento de Guadalajara para atender a mujeres de la capital con previa derivación de Servicios Sociales. Y de parte de la Diputación Provincial, la cantidad de 7.500 euros para atender a madres de la provincia. Asimismo, Fundación La Caixa aportó a final de 2021, 4.800 euros que se destinaron a «un grupo de las madres que en peor situación están, unas 20, a las que les hacemos una compra de productos frescos, navideños y de higiene, porque los no perecederos los pueden conseguir en las Cáritas parroquiales», explica Ester Martínez.
atención. La pandemia ha cambiado su manera de trabajar. Están recuperando la normalidad pero aún mantienen grupos reducidos para los talleres y han tenido que limitar el número de atenciones a las mujeres gestantes.
«Pasamos de más de 100 atenciones en 2020 a 74 en el 2021. Tuvimos que ampliar las ayudas porque había gente que no tenía para comer. Después del primer año de confinamiento, nos vimos en la obligación de reducir la atención. Antes, atendíamos a la mujer gestante y si llegaba una mamá con un niño de meses se le ayudaba, pero tuvimos que limitar la ayuda al objeto de la asociación que es la ayuda a la mujer embarazada», cuenta la única trabajadora de Red Madre.
En 2021, el 25% de las mujeres atendidas eran españolas, el otro 75% restante de más de una veintena de nacionalidades distintas. Con o sin pareja. De todas las edades pero, sobre todo, muy jóvenes, de 17 a 20 años, o ya en edad adulta, en la treintena, que temen perder sus trabajos.
Dentro de este perfil, conocemos la historia de Andrea Ceobano, que procede de Rumanía, y ahora tiene 20 años. Conoció a Red Madre al ser derivada de los Servicios Sociales cuando estaba embarazada de su hija con 18 años. Ahora, sigue apoyándose en la asociación porque afronta el segundo embarazo de su hijo en solitario.
«Venía con miedo porque todo el mundo me decía que era muy joven para tener un hijo y que me iba a arruinar la vida. Aquí, me dijeron todo lo contrario. He encontrado un apoyo muy grande. Otras amigas mías han abortado. La primera vez, yo tenía claro que quería seguir adelante. Y con el segundo, vine dudando. Hoy en día tampoco tengo a mi pareja y me ayudan un montón. No me arrepiento. Estoy muy feliz», relata esta mujer en su sexto mes de gestación.
En sus 13 años de historia en Guadalajara, Red Madre ha atendido a más de 1.200 mujeres y su intervención ha posibilitado el nacimiento de casi 700 niños.